viernes, 17 de agosto de 2012

Una victoria de postguerra

Una victoria de postguerra
por Txabi Ferrero :: DIGITAL SPORT

Todos los jugadores del Almería hicieron un gran trabajo :: udalmeriasad

El camino del Almería hacia Primera, su objetivo deportivo de esta temporada, se cobró en el filial del Barca a su primera víctima. La primera victoria de los rojiblancos llegó por la vía del gol y del sufrimiento.
Los capitaneados por el maño Fernando Soriano necesitaron nada menos que de cinco goles para cobrarse el botín al completo. Pero es el que disputado en el Mini Stadi no fue un partido de fútbol sino todo un incunable, ese tipo de libros que pierden su antigüedad en el tiempo y de los que salen muy pocos a lo largo de una campaña. Un “rara avis” más propio de final de liga que de un arranque de campeonato, muy del gusto de los aficionados y no tanto de los entrenadores por su desorden, descontrol y con pocos momentos para la pizarra y pausa.

Pero los partidos son como son y salen como salen, y más si de por medio está un equipo como el filial azulgrana que mira mucho y bien a la portería rival y poco y mal a la propia. Es sin ningún género de dudas el entrenado por Eusebio Sacristán el conjunto más atípico del Campeonato y ayer volvió a demostrar sus carencias defensivas y sus virtudes en ataque. El fútbol ha escrito muchas máximas y una de ellas asegura que no se puede perder un partido con cuatro goles anotados. Los azulgranas lo hicieron y en el pecado de su escasa contundencia atrás llevaron la penitencia de su derrota.

El Almería fue muy responsable del desequilibrio de los anfitriones. El porcentaje de acierto de la delantera almeriense fue muy alto y contrastó, y mucho, con el desacierto defensivo donde Esteban se mostró dubitativo y confiado por igual y se tragó dos goles a balón parado de Gerard Delofeu más que parables a poco que no hubiera adelantado su posición. A los rojiblancos le sobraron las indecisiones del avilesino y los once primeros minutos en los que los culés le borraron del campo y les hicieron encajar dos goles que pintaban el partido de color azulgrana y muy negro para los de Xabi Gracia.

Los equipos grandes lo son por su capacidad para sobreponerse a momentos adversos y el Almería demostró que quiere y puede serlo porque con poco hace mucho. Y es que si retaguardia flojeó ayer en exceso, la vanguardia se salió literalmente y demostró que el equipo tiene músculo y gol, firmando toda una colección de goles de todas las facturas y con protagonistas diferentes.

El “dúo dinámico” Charles Leo Ulloa no faltó a la fiesta del gol en la que se coló el lateral Cristián Fernández y ampliaron el festín que ayer se dio Fernando Soriano. El maño firmó un doblete, con la cabeza y la testa, repitiendo el que selló en el empate 3-3 de la pasada temporada. El aragonés es un goleador silencioso que, a lo que se ve, le tiene tomada la medida al Mini Stadi.

Los rojiblancos, como si de una ducha escocesa se tratara, combinaron momentos calientes y fríos en un partido loco, con alternativas y un marcador más propio del fútbol de postguerra cuando los equipos jugaban con cinco delanteros y no atendían a convencionalismos ni más estrategia que la de marcar un gol más que el rival.

Xabi Gracia tuvo su porcentaje de culpa en el resultado final. El navarro no se arruga, demostró que tiene carácter cuando haya que tomar decisiones y el equipo jugó con la ambición que su técnico parece haberle impregnado. Hizo debutar al joven nigeriano Ramón Azeev y lo retiró del campo ¡ diez minutos! después de haberle hecho saltar por el lesionado Javi Casquero. Y todo buscando más mordiente y la victoria.

Pero no será este periodista el que trate de sacar una conclusión racional de un partido loco y muy divertido, pero poco cerebral e irrepetible sobre las prestaciones de los unionistas. Lo de ayer es algo excepcional que a buen seguro no volverá a pasar y además demasiado prematuro para sacar lecturas de uno u otro tipo.

4. BARCELONA B: Oier; Balliu, Sergi Gómez, Lombán, Planas; Ilie (Ledes, m.70), Lobato, Rafinha; Deulofeu, Espinosa (Araujo, m.54) y Dongou (Grimaldo, m.46).

5. ALMERÍA: Esteban; Rafita, Mejía, Pellerano, Cristian; Verza, Casquero (Azzez, m.55; Gunino, m.66); Aaron (Joselu, m.88), Soriano, Charles; y Aleix.

GOLES: 1-0, min.5: Dongou; 2-0, min.12: Deulofeu. 2-1, min.13: Soriano; 2-2, min.19: Charles; 2-3, min.48: Soriano. 3-3, min.57: Deulofeu. 3-4, min.83: Ulloa; 3-5, min.88: Cristian; 4-5, min.90+: Deulofeu.
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