Abel y Joselu viajaron por Chumbi y Jonathan por una nueva normativa sobre los jugadores sub'25 de los filiales
DIARIO DE ALMERÍA
Tuvo el honor el Almería de inaugurar el Campeonato Nacional de Liga en la calurosa tarde de ayer. Una Liga rara después del empacho de fútbol por la Eurocopa y los Juegos Olímpicos, por las guerra de las televisiones, por la enorme crisis que viven todos los clubes y que apenas les da para reforzarse. En fin, una campaña en la que el Almería quiere ser grande pese a todos los problemas.
Después de una pretemporada inmaculada donde Javi Gracia ha tratado de implantar una filosofía de toque en la parcela ancha y velocidad por las bandas, los primeros augurios no fueron demasiado buenos. Y es que horas antes de coger el avión al aeropuerto los rojiblancos se encontraron con la primera china en el camino: la Federación cambió la reglamentación de los jugadores sub'25 que estén en un filial. Ahora éstos no puden jugar con el primer equipo si no tienen contrato profesional, y en caso de ser alineados, ya no podrían actuar en los filiales. Para evitar males mayores, Abel y Joselu sustituyen a Chumbi y Jonathan, dos jugadores que han sido importantes para Gracia en verano y cuya situación ahora se presenta engañosa.
El cambio no fue un gran contratiempo en el once titular, puesto que el técnico navarro puso en liza el once más o menos esperado. Quizás la única novedad fue dejar a Ulloa en el banquillo y dar entrada a Aarón. Pero el argentino ha tenido unas semanas de estrés por su continuidad o salida y Gracia quería debutar con los que estuvieran a tope para dar la primera sorpresa a domicilio y la primera alegría a una afición que se deplazó en masa a Barcelona.
Sin embargo, la torrija fue morrocotuda. El Almería pareció no enterarse de que el partido había comenzado y el Barcelona B le dio un buen bofetón para que espabilara. Y menos mal que lo hizo. Balliu primero, que le regaló el gol a Dongou, y Deulofeu después se iban a aprovechar del cacao defensivo que tenían los rojiblancos, que veían llegar rivales por todos lados. No se había cumplido ni el primer cuarto de hora y el Barcelona era un ciclón ofensivo. Pero también flojeaba en defensa y el Almería supo buscarle las cosquillas. No se había cumplido ni un minuto desde el 2-0, cuando Aleix bajó un balón de Christian para que Soriano le quitara los complejos a los rojiblancos. Acto seguido, eso sí, después de que Aarón fallara a puerta vacía y que Dongou estrellara un balón en los palos, volvió a hacer de las suyas por la derecha y Charles demostró porqué el énfasis del presidente en ficharlo. Promete una dupla entre el brasileño y Ulloa de cara al grueso de la campaña.
Veinte minutos y el partido que se había convertido en uno de fútbol sala, con ocasiones en prácticamente todos los acercamientos a puerta. A diferencia de en los primeros minutos, el Barça B ya le había visto los dientes al lobo. El Almería ya se había situado en su terreno y a los culés les costaba más llegar al área de Esteban. Los desbordes y las triangulaciones locales seguían haciéndose a la velocidad de la luz, pero por lo el sistema de ayudas rojiblanca ya evitaba que éstas fueran letales. Antes del descanso, en una acción tan tonta como inocente, Planas corta un balón con la mano y ve la segunda amarilla. Aparentemente, el Almería tomaba ventaja para la segunda parte. Si se mantenían firmes atrás, arriba los almerienses iban a hacer daño.
Y necesitaron ese golpe de suerte que siempre se necesita para ser grande. Soriano, con un punto intermedio entre la chepa y la cabeza, remata un balón al corazón del área y el balón se convierte en el 2-3. Los almerienses habían hecho lo más difícil y ante sí tenían lo más fácil por delante. Pero siempre ha sido un equipo al que le ha gustado complicarse la vida. Azeez, que debutaba por la lesión de Casquero, se jugó la expulsión en varias ocasiones y una cantada de Esteban, que se come un falta sacada por Deulofeu al segundo palo, devuelven la confianza a los de Eusebio.
Viendo que la amarilla del nigeriano era un peligro y que el Almería hacía daño por banda, Ulloa entró por Azeez. Increíble, racional, pero cierto. Y como el partido parecía de bomberos-toreros, el argentino y Christian hicieron estallar de alegría a la afición rojiblanca con dos perfectos cabezazos, pero un gol olímpico de Deulofeu fue el colofón a tres puntos valiosos y muy locos.
Comienza la Liga en el minuto 12
De pretemporada
SERÍA muy fácil hacer de Johan Cruyff y decir que lo vivido ayer tarde en el Mini Estadide Barcelona fue de cuento de hadas, una oda al fútbol. Sin embargo, desde mi punto de vista no creo que fuese así. A veces, un empate a cero puede resultar más entretenido si las acciones de ataque son contrarrestadas con brillantez.
El choque frente al Barça B de Eusebio, el patético técnico azulgrana, no nos sacará de las siguientes dudas: o el filial blaugrana es un coladero, o el Almería es una ametralladora en ataque, o el equipo de Javi Gracia tiene preocupantes carencias en defensa o simplemente no pudimos anular en los primeros compases la calidad de los futuros jugadores del Barça.
Partiendo de la base de que el encuentro pareció más bien un partido de pretemporada, sí se puede afirmar que la mayoría de los goles de uno y de otro conjunto vinieron más por demérito de los guardametas y de la defensa, que de los aciertos de los delanteros. Aun así pudimos constatar que Aleix Vidal continúa en su línea, que Ulloa y Charles siempre están ahí y que las llegadas de Soriano siguen sin fecha de caducidad.
También Christian nos mostró su anunciada peligrosidad a balón parado y Casquero tuvo algunos detalles de calidad. Ahora bien, Esteban no estuvo afortunado y eso lo pudo pagar con creces su equipo. En cuanto a la entrada y la sustitución repentina de Ramón Azeez, mucho o poco se puede argumentar, si bien no creo que eso se lo hiciera el técnico de la Unión Deportiva Almería, Javi Gracia, a un jugador de la primera plantilla.
Habrá que esperar a los siguientes encuentros para ir comprobando el potencial de este buen plantel, al que no le vendría mal un efectivo de calidad en el centro del campo.
En cualquier caso, la primera impresión es positiva a la espera de que la ausencia en la convocatoria de Marcelo Silva sea tan sólo un toque inicial.
De pretemporada
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