Por un campús de fútbol base... Campús Manolín Ferré de La Cañada

Andújar Oliver recibe una placa de manos de Manolín Ferré y Cristian Lores

Unos alumnos entrenando en el Campus de La Cañada

Prácticamente fue ayer cuando los niños de Manolín Ferré se presentaron tímidos, nerviosos y cautos en el campo de La Cañada. Un mes después el desparpajo, la confianza y el fútbol se hicieron paso. Los pequeños jugadores han crecido y su madurez fubolística se ha hecho latente. Todo bajo premisas como el orden, el compañerismo y sobre todo el respeto. Se baja el telón del ‘Campus Manolín Ferré’ con las sensaciones del trabajo bien hecho.
“Los alumnos han cogido los conceptos tácticos y técnicos que nos habíamos impuesto alrededor de un gran ambiente”, comenta el director del campus, Manolín Ferré. “Los niños han aprendido casi sin darse cuenta, y ese era el objetivo”, apuntilla Ferré.
La visita del árbitro almeriense Andújar Oliver sirvió como colofón de un campus que “quiere convertirse en una impronta del fúbol base de Almería”, responde Ferré, que quiere seguir organizando más campus. La palabra “satisfacción” está presente en todas las respuestas de Ferré salvo al referirse a su equipo de trabajo, al que prefiere definir como “un grupo humano precioso”.