Con la mirada puesta en Europa

El Celta, con una trayectoria irregular en Liga, ha alcanzado su esplendor en el tramo final y a base de buen fútbol busca jugar en Europa
JAVIER GÓMEZ GRANADOS | IDEAL ALMERÍA

El Celta de Vigo comenzó la Liga de forma notable para seguidamente caer en depresión, con malos resultados que no estaban acordes con su buen juego. Justo a tiempo ha reaccionado para entrar en Europa y en ello está, a base de goles, de grandes actuaciones y a solo dos puntos de su objetivo. No mira al rival que tiene enfrente, solo a su objetivo, y eso le hace fuerte.

El juego de los gallegos está deslumbrando al tiempo que todos sus hombres alcanzan su mejor estado de forma. Especialmente la irrupción goleadora de Santi Mina, unida a la magia de Nolito, el orden de Khron-Dheli y el instinto de Charles y Larrivey, hacen de los celestes uno de los rivales más duros de la actual competición. Con un fútbol vistoso y ordenado, la confianza necesaria para sentirse superior la ha ido adquiriendo a base de buenos resultados. Todo ello apoyado en una gran plantilla.

Las últimas jornadas han sido un aviso alto y claro a todos sus rivales. La goleada al Rayo Vallecano (6-1), con cuatro tantos de Santi Mina y dos de Nolito; la última victoria ante el Málaga o incluso la derrota frente al Real Madrid en un partido espectacular en el que dejaron los gallegos imagen de equipo grande son, entre otros, la carta de presentación con la que llega el Celta de Vigo al Estadio de los Juegos Mediterráneos. En Balaídos ganó el Almería. La historia ahora es bien distinta porque gallegos y almerienses tienen la moral bien alta.

Plantilla de calidad
Sergio Álvarez es el portero titular que procede, además, de la cantera celeste. Sin ser muy alto, ya que le falta un centímetro para alcanzar el 1,80, destaca en el juego aéreo y se coloca de forma correcta en las jugadas a balón parado. Además, sus reflejos son su gran argumento para mandar en esa parcela del campo. Es un seguro de vida para que el resto de compañeros puedan construir juego bonito con las espaldas bien cubiertas.

Precisamente esas espaldas están protegidas por Hugo Mallo en el lateral izquierdo y Jonny en el derecho, indiscutibles para Berizzo. Rápidos y con capacidad para defender e incorporarse al ataque, ambos reúnen el perfil del carrilero propio del fútbol moderno. De hecho, Jonny ha sido internacional en las categorías inferiores. En el centro de la zaga hay fuerza y calidad, con el exazulgrana Fontás. Junto a él, el argentino Cabral es otro fijo. Y como tercer central, Sergi Gómez.

Exceso de calidad, imaginación y criterio es lo que hay en el centro del campo. La sala de máquinas celeste funciona a la perfección con Orellana, Hernández y sobre todo Krohn-Dheli. Movimientos rápidos de balón, apoyos constantes al ataque, así como colaboración en el repliegue defensivo y en el robo de balón. La línea medular es un lujo y, con permiso de los grandes de la Liga, una de las mejores y de más talento de todo el campeonato. A ello contribuye también Augusto Fernández, ex del Vélez Sarsfield, auténtico pulmón por donde respira el Celta, agresivo y con gran llegada al área rival.

Nolito y Santi Mina son los ídolos de la afición en este tramo final de Liga. El andaluz, por su talento, magia y vistosidad, además de por su eficacia e instinto goleador. El joven Mina, por su velocidad y rapidez de movimientos y de decisiones, así como por su facilidad para marcar goles a pares. Ambos han restado algo de protagonismo, en el momento actual del campeonato, a dos depredadores de alto nivel como son Larrivey y Charles que, sea como fuere, siguen con su instinto matador intacto. También está teniendo algo de protagonismo en el último tramo de la competición el joven belga Theo Bongonda, aunque lejos de influir en el juego como lo hacen sus compañeros de ataque.

Quizás el equipo más en forma en la actualidad sea el Celta de Vigo. El lunes visitará el estadio de los Juegos Mediterráneos con la idea de seguir enamorando con su juego, de vengar la derrota en Balaídos en la primera vuelta y de superar al Málaga en la séptima posición para alcanzar, si es posible, la que puede ser la última puerta de entrada a Europa.
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