El presidente, que carga contra los bancos, asegura que los resultados no son justos con la UD Almería
JUANJO AGUILERA | IDEAL ALMERÍA
La del viernes por la noche fue la primera comparecencia de Alfonso García para hablar de los primeros 'resultados' de una temporada que no arroja los mejores dividendos. Por lo pronto, los números no casan -ni los deportivos, ni los económicos-, por más que el equipo rojiblanco tenga las cuentas saneadas en los terrenos de juego y en la 'caja de caudales'. Pero el juego, que no es el mismo del pasado año, no da para ver a un equipo superior sobre el terreno de juego, aunque sí es cierto que crea más ocasiones que todos los rivales.
Sin embargo, el fútbol no entiende de merecimientos, solo de goles. La calidad de la plantilla influye en no ver más solidez; la solución puede estar en casa, pero requiere de tiempo y también de espacio. Es casi como la 'teoría de la relatividad'. Tal vez sería el nombre idóneo para conocer una Ciudad Deportiva todavía en pañales. Está el espacio, pero no el tiempo porque falta el dinero.
De todo de lo terrenal y de lo celestial habló el presidente rojiblanco para advertir de la falta de ayuda en 'la tierra y en cielo'. Esa ayuda, en la tierra se refiere a la justicia deportiva, porque considera que «en la valoración global de los tres partidos que llevamos hemos merecido muchísimo más» y para eso pide calma. No la tiene sin embargo para hablar de bancos. «Un banquero ve a un equipo de fútbol y es como si viera al diablo. Estoy muy molesto porque llevamos doce años en Almería, creo que no hemos dejado de pagarle a nadie, creo que no hay ningún banco al que hayamos dejado de pagar ni una operación, pero nos meten a todos en el saco y empiezan a comparar», manifestó. Ni tampoco cree que sea justo la persecución de la que hablaba Tebas días pasados por parte de Hacienda a los clubes. «No voy a entender que el fútbol está generando muchísimo a nivel de imagen de España, que se conoce en muchísimas partes por el fútbol, ha dado muchísimo al país, y que el 50% de nuestros gastos sean impuestos y si no puedes pagar un mes que vengan con el hacha a cuestas. Es injusto», explicó.
El equipo
Alfonso García está tranquilo y quiere transmitir esa tranquilidad a los seguidores. El presidente de la UD Almería considera que «hemos tenido como mínimo el doble de ocasiones más que el rival. A nosotros, con poquito nos hacen gol. Algún día será al revés y que hagamos una y marquemos y que el rival haga ocho y no marque o marque uno. En este momento, no estamos decepcionados, pero sí que hemos merecido llevar más de dos puntos», aseguró.
Pide paciencia para los resultados del equipo, aunque no la tiene ni con bancos ni con Hacienda
El viernes pudo ser pero si Ghilas acierta en su disparo en el último segundo. Para él no es nuevo. «Como siempre. Está el equipo volcado, arriesgas un poquito en la salida de balón, te la quitan. Creo que el Córdoba, en la segunda parte, ha sido el único tiro entre los tres palos que ha hecho. No ha sido una jugada, sino un robo de balón».
Por lo sucedido en los tres partidos lamentaba la falta de suerte. «No estamos teniendo mucha fortuna. Creo que ha habido un penalti demasiado claro. Que no lo ha visto el árbitro, pero ha sido un penalti clarísimo. Lo ha visto todo el mundo. No hay dudas», comentó sosegadamente cuando en otra época hubiese montado un 'pollo'. «Son lances del juego. Estamos contentos porque en los tres partidos los rivales no han sido mejores que nosotros y eso es una valoración positiva. Luego, con poquito nos hacen gol y eso no se puede ni ensayar. Es mala suerte».
Sin fantasmas
No considera que sea tiempo para hablar de fantasmas. «Qué fantasmas va a haber. Hay que tener tranquilidad», solicitó el máximo accionista de la UD Almería que hizo referencia a lo que ya pasó en la pasada temporada. «El año pasado aguantamos diez, vamos a ver este año. Sería injusto estar diez partidos sin ganar porque, vuelvo a insistir, podíamos haber ganado los tres partidos. Si esto es a los puntos, como el boxeo, hubiéramos ganado los tres partidos, pero... no hemos ganado ni uno. Hay que tener paciencia y resignación».
Predicó sosiego a la afición. «No queda más que darle ánimos, hay que seguir trabajando. Esto es muy largo y lo vimos el año pasado. Es una carrera tan de fondo que terminamos extenuados hasta los espectadores. Hay que estar con el equipo y darle confianza. Esto acaba de empezar».
Pero sí que es cierto que el asunto del gol es preocupante, aunque expuso la justificación hacia quien llegó para hacerlos y no los marque ahora. «Son circunstancias del fútbol. A lo mejor después tiene dos y marca las dos. Los goleadores van por rachas. Llegará un momento en que meta en tres partidos seguidos y ahora no ha marcado».
Lo que le da alegría es ver debutar a jugadores jóvenes. El año pasado fue Kyu y el viernes Gaspar. «Este chaval, si sigue la progresión que lleva, va a ser un jugador importante. Está muy centrado, tiene mucha calidad, tiene visión». En sus discurso fue más claro incluso. «Es de los jugadores que dice que nacen para jugar. Hay futbolistas que se hacen con el tiempo y este, con esta edad, es capaz de encarar, de irse y de ser un jugador normal. No lo he visto en los entrenamientos, pero la referencia es que es uno más. Se le ve jugar como uno más de la plantilla y hacer lo que hacen los demás. Es un salto cualitativo para la cantera del Almería».
Este es un producto de cantera, pues la presente es la tercera temporada en el club rojiblanco, desde su llegada para jugar en el equipo cadete. El presidente se congratuló de los éxitos de las bases, que podrían mejorar con la llegada de la Ciudad Deportiva. «Estamos trabajando en el proyecto y cuando tenga que ser será. Para esta temporada ya están todos los equipos ensamblados, en donde tienen que entrenar y jugar, la residencia, que hay 28 o 30 niños, con algunos de la capital y otros de fuera, incluso de fuera de España. En la residencia hay de todo y está todo tranquilo, ensamblado y controlado. La ciudad deportiva nos tiene que dar ese punto más de conseguir que la UD en las bases siga creciendo más, que ha crecido sin ciudad deportiva. Estoy muy orgulloso del trabajo que han hecho en las bases».
Las cuentas de Alfonso no dan superávit
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