jueves, 22 de agosto de 2013

Pasen de estadísticas

Pellerano echa mano de datos de la temporada pasada para demostrar que los números no condicionan. Reconoce que algunos fallos del lunes vinieron por lo cómodos que jugaban
PABLO LAYNEZ |  DIARIO DE ALMERÍA

Christian se lanza a los pies de Pellerano para recuperar un balón

Getafe no es una plaza cómoda para el Almería. En Primera División no ha ganado nunca y, además, ha encajado goles en cada una de las cuatro temporadas en las que se han enfrentado en el Coliseum Alfonso Pérez [4-2, 2-2, 2-2 y 2-0]. Pellerano ya ha jugado allí con el Almería, reconoce que no será fácil, pero no mira a los números porque sabe que no sirven para nada. Para demostrarlo, puso el mejor ejemplo posible.

"El Alcorcón también había marcado en todos los partidos la temporada pasada en su estadio y llegamos nosotros y ganamos 0-3. Y el Girona también era un equipo muy goleador y no marcó ni uno ante nosotros en la eliminatoria de ascenso. Las estadísticas no me preocupan, si trabajamos bien, las cosas nos saldrán", explica el argentino que quiere quitarse el mal sabor de boca de esa última visita rojiblanca a tierras getafenses: "Allí se hizo matemático el descenso, pero sólo fue la crónica de una muerte anunciada. Bajamos allí, pero durante el año ya nos vimos en Segunda División en muchos campos".

Con todo olvidado, el Almería está centrado en conseguir un buen resultado. El central sabe que siguiendo la línea de Villarreal se puede conseguir un buen resultado, pero hay cosas que pulir pronto. "Se hicieron muchas cosas muy bien, lástima que también algunas mal y ésas nos costaron los puntos. Tenemos que aprender y no repetir lo malo en Getafe", donde el equipo llegará algo cansado después de tener muy poco tiempo de descanso: "Es una semana rara. Hemos estado bastante tiempo sin jugar, hemos empezado los últimos y ahora apenas tenemos tiempo de recuperación entre los partidos. Es difícil, pero es lo que toca y esperemos recuperar los puntos perdidos ante el Villarreal".

Pelle se siente cómodo con el estilo de juego que quiere Francisco. El pasado lunes se le vio saliendo con mucha autoridad desde atrás y sacando el balón como un centrocampista más. "Fran pide que saquemos el balón jugado y el otro día me dejaron a mí. Tenemos que ayudar a crear jugadas, igual que la gente de arriba nos ayuda a defender. Me sentí cómodo porque siempre que uno le gana un duelo persona a un futbolista poderoso como Uche se siente bien. Pero si uno no gana, no se siente cómodo", y quizás esa derrota pudo llegar por la tranquilidad con la que tocaba el balón el equipo rojiblanco: "El riesgo en el juego depende de nosotros. El gol viene de un error individual al tratar de sacar la pelota jugada. Sabemos lo que quiere Francisco, pero somos nosotros los que lo llevamos a la práctica sobre el césped. Estábamos tan cómodos, disfrutando con el juego y veíamos a la gente contenta, que tratamos de ir a por el segundo en vez de recular un poco con el resultado", finalizó el argentino.
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