El Real Jaén vence con autoridad y un gran juego al potente filial del Almería y acaba el año como líder

El gordo del Grupo IV (3-0). El Real Jaén vence con autoridad y un gran juego al potente filial del Almería y acaba el año como líder de su liga

MIGUEL ÁNGEL CONTRERAS | IDEAL JAÉN
La Victoria acabó el año esta tarde cantando el «campeones, campeones», con «olés», con el «volveremos a ascender» y nada de ello pareció exagerado. Hoy por hoy, el Real Jaén es el más fuerte, el gordo del Grupo IV, el gordo. Acaba 2012 en lo más alto, líder del Grupo IV tras un partido fabuloso en el que dio un repaso a un gran equipo al que empequeñeció hasta convertirlo en un equipo de niños, cuando solo es un filial y muy bueno. Lo amordazó desde el minuto uno y lo acabó bailando en una segunda parte primorosa. Le marcó tres y el resultado fue corto: dos postes, unos contra uno errados, pases de la muerte sin puntilla... El Real Jaén gustaba y se gustaba. Incluso la falta de gol parecía tan lejana como los tiempos en que el objetivo eran los 45 puntos, aunque ambos sean de anteayer. Porque el Real Jaén comenzó contra el Almería B sus fiestas navideñas con un señor chupinazo. Ahora toca disfrutar de una blanquísima Navidad.
Poco pudo hacer el filial ante un Real Jaén inspiradísimo. Herrero decidió que el pichichi Cascón, tras semanas de inactividad se quedara en el banquillo. Machado, con gastroenteritis en los últimos días, jugó. Y cómo jugó. Haciendo de nueve y de diez. Con la pausa, la visión de juego y una conducción de jugador superior. Dejó detalles para la retina, como una cuerda cerca del borde del área pequeña intentando superar por arriba a Lopito, al que faltó un suspiró. El capitán recibió las aplausos de la grada. Está de dulce.
Como lo ha estado casi todo el equipo. La Victoria empezó a fraguarse pronto. Tras un par de ocasiones en las que el meta Lopito evitó el tanto, poco pudo hacer ante Óscar Quesada, que aprovechó un rechace del cancerbero jienense para meter la punta de la bota y el primero. La jugada nació de un robo de balón en la frontal de Mario Martos, tal era el hambre local.
El dominio siguió y al filo del decanso, una preciosa pared entre Juanma y Raúl Gaitán, genio y figura, la mandó este último a la red, con la tranquilidad de quien lleva un nueve en la espalda en lugar de un dos.
El Almería B comenzó la segunda mitad haciendo una piña en el medio campo, conjura para buscar la remontada. No se sabe qué hicieron los del Real Jaén en el vestuario, pero sin duda funcionó mejor. El partido siguió la tónica habitual, e incluso poco a poco pareció que La Victoria se inclinaba hacia la portería de Lopito, como si las grietas del estadio también quisieran poner su granito de arena. Israel Jerez se estrelló con el poste y el Real Jaén siguió llegando y llegando. Máxime cuando el colegiado expulsó con roja directa al capital rojiblanco Alberto, por derribar siendo el último hombre al atacante blanco directo a portería.
Cascón, ovación compartida con Machado al que sustituyó, tuvo el gol en un balón al travesaño a pase de Migue Montes. Israel se desquitó haciendo el tercero cruzando al otro palo. Y La Victoria estalló con el campeones, campeones. Viendo sus nóminas y dónde están, desde luego que lo son.
El gordo del Grupo IV (3-0) - Real Jaén