Por ilusión o por lo que sea... pero hay que ganar

Al Almería le urge el triunfo frente al Xerez Deportivo para ver más claro el futuro
JUANJO AGUILERA :: JOSÉ GABRIEL GUTIÉRREZ | IDEAL ALMERÍA

Lucas Alcaraz pedía el viernes, en su comparecencia habitual antes del partido del fin de semana, que se debería cambiar el chip de la necesidad por el de la ilusión. Lo cierto es que a la UD Almería se le acumulan las necesidades o, para ser más concretos, la obligación de ganar ya. Si no se hace se alargaría la peor racha de resultados del equipo en la presente temporada, aquella que dio paso a diez jornadas sin perder con seis victorias y cuatro empates. Lo cierto es que en la presente tampoco se ha cedido tanto, sólo dos victorias -las sumadas por Celta, en Balaídos, y Elche, en el Estadio de los Juegos Mediterráneos-, pero toca ganar. La victoria también conlleva impedir que las ilusiones de los perseguidores se hagan realidad. Son unos cuantos los que han recortado diferencias y poco, por tanto, el margen de 'estabilidad' que le queda al conjunto rojiblanco.
Es jugar con la ilusión de los de abajo para solidificar la propia. Las victorias en deporte, ya sea fútbol o petanca, son como los cupones de la ONCE, la ilusión de todos los días y la forma de pensar del granadino una manera de quitar presión, aunque al fin y al cabo se persigan los puntos, bien por la vía de la necesidad o bien tratando de llegar a ellos a través del disfrute.
Los rojiblancos afrontan un partido en el que el rival no es lo de menos. El Xerez, con los deberes casi hechos -que difieren en mucho de los sueños que tenían cuando despertaron en pretemporada- darán guerra hoy. Ya lo hicieron en la ida en un partido en el que suya fue la posesión y algunas oportunidades claras, pero en el que la UD demostró que sus intenciones de estar donde hoy se encuentra no era pura coincidencia de la 'época'.

Mirarse al ombligo
La UD Almería mira al Xerez pero lo hace de reojo. No olvida su propuesta y dificultades, como el viernes dejó bien claro Alcaraz, pero éste sabe y los resultados de la temporada así lo dicen que el partido será lo que los rojiblancos quieran.
Es cierto que la del Almería es una plantilla corta, pero los jugadores que salgan en el once inicial seguro que más de uno y de dos de los equipos que hay en la categoría, en la zona alta, los quisieran tener en sus filas. Son los avales con los que afrontar un partido en el que el técnico tiene la baja de Juanma Ortiz -será su primer 'descanso' de la temporada-, pero recupera al jugador que más equilibrio concede al equipo cuando está en el campo, Fernando Soriano, que curiosamente dio los tres puntos a los almerienses en la ida, en Chapín. Valladolid es el último ejemplo de la capacidad de liderazgo de un jugador que ha podido tener horas malas -más bien minutos- a lo largo de la temporada, pero que cuando no está en el campo nadie hace lo que él y, en cambio, su presencia en el campo se nota en el aspecto de crecimiento del equipo.
No por la baja de Juanma Ortiz y sí por los percances de Miguel Ángel Corona -pidió el cambio en el descanso del partido frente a la UD Las Palmas- y Aarón -con molestias en el arranque de la semana-, que han trabajado con normalidad desde el miércoles, Alcaraz convoca a 19 jugadores, los 17 disponibles de la primera plantilla y Abel Molinero y Jonathan, del filial, con inclinación a que caiga alguno de los 17 en lugar de uno los dos últimos.
Con esos mimbres, que ayer trabajaron en el Estadio de los Juegos Mediterráneos para cerrar algunos detalles a utilizar en la tarde de hoy, tendrá que buscar una victoria que debe nacer en el equilibrio con el gol, que en este deporte no consiste en tener los mismos goles a favor que en contra, sino hacer más goles y que te hagan menos. Aunque también vale lo que decía Cruyff -al menos es de quien conozco la frase-, que prefería perder un partido por 6-0 a ser derrotado en seis por 1-0. Lo cierto es que los rojiblancos, desde el último partido ganado frente al Real Murcia, han marcado casi lo mismo que encajaron -12 a favor por 13 en contra-. La renta, de todas formas, no ha dado para que la suma pase de tres puntos, fruto, eso sí, de los empates en los tres últimos partidos, que ofrecen una lectura positiva, pues el empate es el resultado que más próximo está de la victoria.

Solidez
Recuperar la solidez de la primera vuelta y evitar ese 'paso atrás' que ha sufrido el equipo por un segundo -el que cogen de ventaja los rivales en acciones a balón parado- es la clave para superar a un rival que requerirá atención en el juego a la contra. Una lección estudiada en estos días últimos y que tiene, de puertas hacia fuera, a diez hombres fijos en el equipo y dos para luchar por un puesto, el de lateral izquierdo. Ahí, está la duda que el técnico no tiene sobre si alinear a Michael Jakobsen o darle de nuevo el puesto a Dani Bautista. De todas formas, pudiera ser que el propio Jakobsen estuviera, pero como central, dejando fuera a Santi Acasiete. El jugador danés ha demostrado tener buena subida de balón, aunque el peruano goza de la veteranía que le permite ganar por astucia a sus rivales.
Lo dicho en la rueda de prensa del viernes aventura a la posibilidad de que jueguen los tres centrales, con el nórdico en banda y Carlos García y Santi Acasiete, por el centro, con Rafita en la banda derecha. No cambia el resto del once, con Esteban bajo palos; Verza y Corona, en el centro del campo; Aleix Vidal y Goitom alternando las bandas con Soriano en la media punta y Leo Ulloa por delante, siendo la primera referencia ofensiva y la primera en el trabajo defensivo, el de la presión en la subida de balón.
De ser Dani Bautista, sería la vuelta del sevillano a un once inicial después de casi tres meses sin jugar. El lateral zurdo que llegara procedente el Girona jugó su último encuentro frente al Alcorcón y, aunque ha entrado en las últimas convocatorias desde el partido frente al Elche, no ha gozado de minutos desde aquel 8 de enero. Lo cierto es que tiene posibilidades, ya que se le ha visto participar en un supuesto equipo titular a lo largo de la presente semana, lo que puede ser, sin lugar a dudas, un aviso a navegantes sobre esas opciones de ser titular hoy.

Desde la defensa
El Xerez está en tierra de nadie, con lo que eso supone. Es cierto que no tiene asegurada la permanencia matemática, pero eso debe ser cuestión de días. Lo cierto es que el equipo de Vicente Moreno es un equipo que ha mejorado desde la llegada del exmedio centro que sustituyó a Juan Merino en el cargo y cambió formas.
El Xerez Deportivo de ahora tiene menos toque en el centro del campo, pero es más vertical, en ese intento de buscar a José Mari y Tato, sus referencias en ataque. Una fórmula que tiene el refrendo de los resultados, comenzando el edificio desde los cimientos, el entramado defensivo, para luego ir creciendo en otras líneas.
De momento le queda y ya ve puerta. A lo largo de la temporada esa sociedad necesaria para ganar quedó rota en nueve jornadas -son los partidos sin marcar, siendo el último el de la pasada semana frente al Elche, tras siete marcando-. El Xerez es un equipo que seguramente dará problemas. La Liga no tiene equipos que cambien 'duros a cambio de seis pesetas'. Eso sí, fuera marca menos de un gol de media por partido -14 en 15 jornadas, pero con tres en su última salida, donde cayó 5-3 frente al Girona-.
Para tratar de encontrar ese equilibrio necesario busca la victoria para la que ayer trabajaron antes de partir hacia Almería. La sesión, que transcurrió con total normalidad, se centró en aspectos tácticos y en la disputa de un partido entre los integrantes de la primera plantilla. Los remates a puerta acabaron de completar el trabajo matinal en una sesión en la que no estuvieron por lesión ni Gerard Autet ni Rafa Barber. Vicente Moreno dio la lista en al que no están ambos, como tampoco Rafa García, que vio la quinta tarjeta amarilla ante el Elche y ha sido castigado por el Comité de Competición con un partido de sanción. Por decisión técnica han quedado fuera Toni Lechuga, José Vega y Capdevila. Sí vuelve a disponer de Capi, que no jugó frente al Elche por sanción, y Cordero, recuperado de molestias en el gemelo de la pierna izquierda y que no juega desde el 3 de marzo, en partido disputado frente al Córdoba.
Además, Lombán y Tati Maldonado, que entrenaron con molestias esta semana, están restablecidos y no sólo entran en la convocatoria, sino que además serán parte del once que presente el que fuese capitán jerecista en su etapa como futbolista en activo, en la que ilusionó a sus seguidores.
Hoy, el Almería quiere ilusionar también a la suya con una victoria que, a través de esa ilusión o de la necesidad, no debe demorarse.

EL ÁRBITRO DE HOY
López Acera, su segundo al Almería. La dirección arbitral del partido corre a cargo del extremeño Fernando López Acera, nacido en Mérida (Badajoz) y residente en Don Benito. Es pedagogo de profesión y debuta esta temporada como colegiado de Segunda. Su estreno en la categoría acaeció en el partido disputado entre el Córdoba CF y la UD Almería (1-1) que tuvo como escenario el Nuevo Arcángel, donde se 'tragó' un penalti en el área del Córdoba.
Cinco Ligas en Segunda B. El ascenso a la categoría le llegó después de cinco temporadas en Segunda B. Le puso rúbrica a su ascenso, tras una excelente campaña, dirigiendo el partido entre el Lugo y el Alcoyano, de promoción de ascenso, que finalizó con la victoria (0-1) del equipo alicantino y que le supuso el ascenso a Segunda División.
Trayectoria muy nivelada. Desde su debut en Córdoba-UD Almería son 16 los que lleva arbitrados en el campeonato. El balance está bastante nivelado. En siete de ellos se anotó la victoria el equipo local, dos acabaron con empates y en los siete restantes ganó el conjunto visitante. Al Xerez le arbitró en Chapín contra el Girona FC (2-1).
Once rojas en 16 partidos. En cuanto al apartado de tarjetas que, desde su debut en la categoría, lleva mostradas, la media que presenta es de seis por partido, el último en la pasada jornada, entre el Numancia y el Valladolid, en el que batió su récord de menos tarjetas, ya que sólo mostró una. En el polo opuesto, en el que más, en el Las Palmas-Nástic, con once. No le anda a la zaga sus números en lo referente a tarjetas rojas, ya que en 16 partidos son once las que lleva mostradas el colegiado del partido de hoy.