El roquetero Beltrán intenta proteger el esférico ante el exrojiblanco Javi Moyano
El conjunto roquetero tuvo el dominio, puso las mejores ocasiones pero vuelve a echar de menos la falta de efectividad
Con este resultado los de Pepe Callejón no pueden abandonar la zona de peligro
FRANCISCO JAVIER / ROQUETAS DE MAR | DIARIO DE ALMERÍA
Si el penalti en contra que le pitaron a los roqueteros la semana anterior en el derbi ante el Almería B llegó a los cinco minutos, en la mañana de ayer sería poco antes de cumplirse los diez primeros por una supuesta mano dentro del área. De nuevo los rojillos se encontraban ante otra tempranera adversidad en un partido en el que había mucho en juego. Raúl Guillén, de nuevo, protagonista de una dudosa pena máxima que se encargó de transformar un viejo conocido para la afición almeriense, Javi Moyano, exjugador del filial rojiblanco.
Y es que la jornada ya empezó con problemas antes incluso de comenzar el encuentro. Pepe Callejón, que debutaba en el banquillo del equipo del Poniente almeriense, tenía que llamar a filas al tercer portero, Younes, debido a que Javi Ruiz volvía a la titularidad tras conocerse que el cancerbero José Miguel había caído enfermo. Pero a pesar del 0-1, los roqueteros no se vinieron abajo, no se deshicieron sobre el terreno de juego y mantuvieron la forma y el sistema de juego de partidos anteriores, volcándose en busca del empate ante un Melilla al que empezó a meter en su campo, pero cuyas contragolpes eran muy peligrosas. De hecho, Katxorro, otro viejo conocido, estuvo muy cerca de lograr el 0-2 con un potente disparo con su pierna mala que casi sorprende a Ruiz. Los melillenses avisaban de que a pesar de ceder terreno a su rival tras el 0-1, tenían capacidad suficiente para hacer más daño a los rojillos.
Se entró en una dinámica con sensaciones parecidas a las que se vivieron en el Estadio de los Juegos del Mediterráneos la pasada semana, con un Roquetas que quería empatar y daba la impresión de poder lograrlo, era cuestión de tiempo. Los minutos pasaban y se llegó al descanso con la mínima ventaja para los visitantes, a pesar de que Juanje insistía por banda izquiderda al final de la primera mitad en busca de un hueco para establecer el 1-1 antes de marcharse ambos conjuntos al vestuario. No pudo ser. El Melilla se marchaba por delante en el marcador gracias a un gol que le cayó del cielo.
En la segunda apareció más Rubén Rivera y los almerienses ganaban más mordiente en ataque. Callejón dio entrada a Mario y Javicho, jugadores que estuvieron muy activos ante el Almería B en el derbi. Se marcharon Beltrán y Grillé, más tarde lo haría Kike Vázquez para dejar su hueco a Manolo. Se la jugaba el técnico haciendo los tres cambios con casi toda la segunda mitad aún por delante para un Roquetas que tenía la posesión, era el que creaba todas las ocasiones, pero solamente le faltaba un gol que llegaría en el minuto 72.
Martín Belforti, con un derroche de podería aéreo, hizo el 1-1 al rematar un córner sacado por Manolo. Con el empate el juego se volvió loco, con tres ocasiones en poco tiempo, dos para los de casa y una para el Melilla en la que Javi Ruiz tuvo que lucirse. Se llegaría a los últimos minutos del encuentro y la última la tuvo Rubén Rivera, al que le falló la definición. En el 90', Mario vería la segunda amarilla y el Roquetas se quedó con diez, aunque no le perjudicaría porque el colegiado no descontó ni un minuto de tiempo extra.
Un empate que sabe a poco para los 'rojillos'
No hay comentarios:
Publicar un comentario