Corona ha protagonizado los grandes momentos del club, como el ascenso a Primera
· "Desde el primer día fue de esos amores a primera vista, en cuanto nos conocimos, nos gustamos", admite el centrocampista talaverano
· Su reto, tras renovar, es volver a Primera División
PACO GREGORIO / DIARIO DE ALMERÍA
-Tras su renovación oficial por una campaña más va usted a encadenar siete años consecutivos como rojiblanco...
-Estoy muy feliz porque ya sabéis que mi identificación con el Almería es absoluta y encima si es participando, como es el caso.
-¿Esa identificación también es con los almerienses?
-Sí, bueno, al final te vas haciendo a la ciudad donde estás y su gente. Desde el primer día fue de esos amores a primera vista, en cuanto nos conocimos nos gustamos y si a eso le sumas que puedo ejercer mi profesión -lo que más me gusta del mundo- en esta ciudad, pues muy feliz.
-Un flechazo en toda regla...
-Tuvimos un inicio muy complicado, pero luego todo empezó a rodar cuesta abajo y fue un flechazo, tanto a mí me acogieron de una manera que no me esperaba ni me había pasado y yo me identifiqué muy rápido con todo lo que aquí sucedía. Eso hizo que esta relación pueda seguir.
-¿Esperaba este idilio tras llegar cedido desde el Real Zaragoza?
-La verdad es que no me lo podía imaginar. Vine con un contrato de cesión por una temporada y en ninguno de los casos, ni los más optimistas, podía imaginar que aquel verano de 2006 se convirtiera en invierno de 2012, seis temporadas más una venidera. Salvando lo del descenso, que para un club como el Almería tampoco puede considerarse un fracaso, creo que hemos vivido la mejor época de este club, el mejor período de su historia y yo he participado en él, con lo que me siento tremendamente orgulloso.
-¿Recalar en el Almería le dio la continuidad que le faltaba?
-Son de esas decisiones que, sin darte cuenta, en ese momento te marcan el futuro de tu vida deportiva. Recuerdo que aquel verano el Albacete volvió a pedir de nuevo mi cesión y yo no estaba del todo convencido. Llegar a Almería supuso un cambio radical.
-Con 30 años aún le quedan muchos años de fútbol, ¿pero con qué se queda si echa la vista atrás?
-Tengo muchos momentos, lo más bonito de esta historia es que he vivido la mejor etapa de este club. Me quedo con el ascenso, la primera temporada en Primera llena de alegrías, desde el debut en La Coruña a la visita del Real Madrid, cuando cumplí mi partido número 100, el año pasado dimos una alegría en Copa del Rey... Solo veo buenos momentos empañados por el descenso, pero hay que ser realistas y podía pasar. La etapa es nueva e ilusionante con el reto de poder volver algún día.
-¿Ha sido Unai Emery el entrenador que más lo ha marcado en estos años?
-Unai es el que cambia mi dinámica, eso es obvio. No había conseguido una continuidad y con él la encuentro, pero tampoco puedo olvidar a Juanma Lillo, que me hizo ver el fútbol desde un aspecto muy táctico a nivel de aprendizaje y es cierto que vivimos una época muy bonita, sobre todo el primer año de buen juego. A todos los técnicos que han pasado por aquí les reconozco su trabajo de algún modo porque sin ellos yo no habría tenido esta vida deportiva. Me han hecho crecer en el rendimiento y así el club ha contado conmigo.
-La renovación se produce tras jugar al menos 45 minutos de 40 partidos, puede decirse que se lo ha ganado en el campo.
-Se da porque estoy jugando y dándole un rendimiento al club, en ese sentido estamos muy felices los dos y la renovación es fruto del acuerdo.
-De hecho, Esteban, Aleix y usted son los únicos que han jugado todos los partidos de Liga.
-Es un dato, todavía no he llegado al ciclo de tarjetas ni he tenido lesiones. En algunos partidos he jugado más y en otros menos, pero lo importante es estar en disposición de poder ayudar al equipo.
-Por enésima vez, ¿le gustaría poner fin a su trayectoria deportiva como rojiblanco?
-He respondido muchas veces a esa pregunta, eso sería una grandísima noticia aunque sabemos que el mundo del fútbol es muy itinerante. Prefiero no obstante pensar en el presente, además en un año como el que estamos viviendo, con un reto tan apasionante como puede ser un nuevo ascenso.
-¿En principio piensa solo hasta junio de 2013 o más allá?
-Hay un período por delante de año y medio, con lo cual no es motivo para ponerse a pensar en qué pasará en esa fecha. Cuando llegue el momento, si hay voluntad por ambas partes, no habrá problema. Estaré tranquilo y pensaré únicamente en el devenir del equipo.
-Lo que no puede negar es que le ha dado tiempo para conocer bien Almería y su provincia...
-Tenéis, tenemos [se rectifica a sí mismo] una provincia muy extensa y seguro que hay rincones que no conozco. Muchas veces me cruzo con gente por la calle que se ofrece a enseñarme sitios desconocidos para mí.
-¿A dónde llevarías a un amigo que viene de Talavera?
-Hay muchos sitios, disfrutamos de uno de los parajes naturales más bonitos de España y sería uno de los primeros destinos para enseñar a la gente que viene de fuera, pero la ciudad también tiene rincones bonitos como el centro histórico con la Alcazaba y el Cerro de San Cristóbal, hay muchos lugares que merecen la pena.
-Para concluir, podría decirse por tanto que el flechazo ha sido doble, de usted hacia Almería y de Almería hacia usted...
-Si se están seis, camino de siete años juntos, es porque las dos partes quieren, de lo contrario hoy en día no se aguanta nadie siete años.
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