"Ni bien ni mal"... el cambio de Baba en Almería es espectacular
El centrocampista ghanés le ha dado un vuelco radical a su situación, es feliz e indiscutible para Rubi
Baba, durante un entrenamiento.UD ALMERÍA
ANTONIO MARTÍNEZ
18/11/2024
Todo el mundo se acuerda de la frase viral que dejó Iddrisu Baba hace poco más de un año en el aeropuerto de Palma de Mallorca cuando se disponía a volar hacia Almería para estampar su firma en el contrato con el club andaluz. Los compañeros de ‘Esports IB3’ cazaban a un Baba sorprendido que, al ser preguntado por cómo se encontraba tras su fichaje respondía: “ni bien ni mal, estoy regular”. Esa declaración se extendió como la pólvora por redes sociales y terminó convirtiéndose en un fiel reflejo de su primera temporada en la UD Almería, culminando con el descenso de categoría.
A Baba le costó un mundo el cambio de aires, por su personalidad, por la situación en la que se encontró el equipo desde el principio y por su compleja vida personal, al encontrarse solo en Almería. De hecho, en noviembre del año pasado, Baba dejaba unas declaraciones muy preocupantes en la radio oficial del club rojiblanco, en las que aseguraba que “hace mucho que no salgo de casa” y que “no canalizo la tristeza con nadie. Paso mi tiempo libre en el sofá con el móvil”. Unas palabras que hicieron saltar las alarmas en el seno del club e intentaron ayudarle en el lado humano. Muy al contrario de lo que deslizaban los jugadores la temporada pasada cuando hablaban públicamente, se ha conocido que, debido a la situación deportiva, no existía un grupo cohesionado en el vestuario. Algo que no ayudó a Baba hasta la llegada en el mes de enero de Bruno Langa, su primer gran amigo en la plantilla.
Mediocre temporada, incluso pudo irse
El ghanés era otro jugador completamente diferente a lo que había podido demostrar en el Mallorca, del todo irreconocible, con serios problemas a la hora de manejar el balón, cometiendo pérdidas importantes y sin llegar a ser tampoco el ‘stoper’ en el que el Almería se había fijado para sustituir a Samú Costa. Su temporada fue tan mediocre, al igual que la del resto de sus compañeros, que incluso estuvo a punto de irse en abril, antes de que concluyera la temporada en Primera, a la MLS. El futbolista llegó a viajar a Madrid, desde donde debía coger otro vuelo a Boston para cerrar su fichaje con el New England Revolution, pero la Dirección Deportiva del conjunto indálico no llegó a un acuerdo económico con el equipo estadounidense.
Con la vuelta de Rubi y la continuidad de Baba en el equipo en Segunda división, nada parecía que iba a cambiar, puesto que el ghanés no jugó ni un solo partido como titular hasta la jornada 8ª. En aquel partido en casa frente al Burgos, Baba hizo un partidazo y el Almería terminó llevándose el triunfo con un jugador menos, rompiendo una racha de cinco jornadas sin ganar. Desde entonces, el ex del Mallorca es inamovible en el centro del campo para Rubi y sólo se ha perdido dos encuentros por lesión, en el resto ha sido titular. Ahora parece otro jugador, es clave en el nuevo esquema del equipo con el 4-4-2 y ha sido una de las principales razones del cambio de rumbo del club.
Cuando llegamos, encontramos a un jugador apagado, que no era feliz, que había perdido la confianza y hasta el disfrutar del fútbol
Rubi, técnico del Almería
Su transformación fue explicada por Rubi en el día de ayer tras el partido ante el Deportivo en el que volvió a brillar: “Cuando llegamos, encontramos a un jugador apagado, que no era feliz, que había perdido la confianza y hasta el disfrutar del fútbol. Nosotros nos llevamos una sensación muy grata viéndolo entrenar, aunque obviamente ya lo conocíamos. Es un jugador que, en las primeras siete jornadas, no ha partido como titular y nosotros ya veíamos que teníamos un jugador con potencial ahí. Supo esperar su oportunidad, ponerse bien y recuperar la confianza. A él le vino bien también no empezar de inicio porque necesitaba tiempo y ahora es un jugador extraordinario, que recupera lo que no está escrito y, además, está bastante seguro con el balón que era otra de las cosas que a lo mejor se le podía achacar. ¡Ojalá nos dure ese nivel!”.
A él le vino bien también no empezar de inicio porque necesitaba tiempo y ahora es un jugador extraordinario, que recupera lo que no está escrito
Rubi, técnico de Baba
Ahora Baba es feliz, está mucho más integrado en el grupo (cosa que se refleja en el día a día), ha hecho amigos de verdad y el contexto del equipo es otro. Todo eso ha hecho que Baba se transforme en el futbolista que un día se vio, que encandiló a Vicente Moreno y que ahora lo está haciendo con Rubi y una afición rojiblanca que está encantada con él. Baba ya no está ni bien ni mal, simplemente está espectacular.