Los rojiblancos pagaron caro su desacierto cara al gol frente a una Llagostera 'peleona'
JUANJO AGUILERA | ALMERÍA
25 mayo 2016
22:48
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No está todo perdido, pero casi. El empate de la UD Almería frente a la Llagostera deja a los rojiblancos en su habitat natural, la zona de descenso, a la que vuelve porque la Ponferradina ha hecho los deberes frente al Albacete, que carga las maletas para el Segunda B. Lo cierto es que si el equipo rojiblanco hubiese conquistado la victoria por goleada ningún equipo rival hubiese tenido quejas.
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UE Llagostera
René; Edu Oriol, Escassi, Chus Herrero, Samu de los Reyes; José Carlos (Fofo, m. 65), Marcos Tébar, Pitu (Emilio, m. 74), Imaz (Chumbi, m. 74); Natalio y Juanjo.
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UD Almería
Casto; Michel Macedo (Chuli, m. 70), Saveljich, Jorge Morcillo, Ximo Navarro; Lolo Reyes, Ramón Azeez (José Ángel Pozo, m. 88), Fran Vélez (Joaquín Fernández, m. 70); Quique González, Dubarbier, y Kalu Uche.
ÁRBITRO
Ais Reig, del colegio valenciano. Amonestó a Escassi (m. 63), Chus Herrero (m. 77), de la UE Llagostera, y a Esteban Saveljich (m. 60), Lolo Reyes (m. 62), Dubarbier (m. 83) y Ximo Navarro (m. 90), de la UD Almería. También hubo amarilla para Oriol Alsina, técnico de la Llagostera, (m. 39).
INCIDENCIAS
Partido correspondiente a la cuadragésima jornada del Campeonato de Liga de Segunda División A, Liga Adelante, celebrado en el Estadi Palamós-Costa Brava, con unos 3.100 espectadores en sus gradas, entre ellos una representanción de seguidores rojiblancos.
El Almería que jugó en el Palamós-Costa Brava no se dejó nada, lo dejó todo en el campo, se vació, pero no fue capaz de hacer lo que tampoco ha conseguido muchas veces esta temporada. El déficit de goles a favor no es sino la culpa de la falta de portería, nublada últimamente por los goles de los últimos partidos -los tres al Bilbao Athletic, los tres a la Ponferradina y los tres al Oviedo-. Tres palos, dos de ellos 'mayores', y disparos que pudieron ser gol se quedaron en el 'pudieron' y las opciones de salvación están ahora tan lejos de los almerienses como el balón de la portería de René Román.
Los de Soriano manejaron el partido casi al completo. Sólo en el inicio de la segunda parte, al Almería le faltó el aliento, pero en la recta final se tiró a por la victoria, a tratar de acabar el partido en el área rival. Lo consiguió, pero no logró el premio que pudo merecer, aunque a estas alturas qué más da hablar de merecimientos si estos no rescatarán al Almería del decimonoveno puesto que ocupa ahora mismo y que le obliga a rezar, pero no sólo a eso, para creer en salvarse.
Rival maniatado
Sorprendió el Almería con el dibujo que puso Soriano, apareciendo Dubarbier como interior y Ximo Navarro en la banda izquierda, como lateral. La Llagostera salió con tranquilidad, casi estudiando cómo jugaría la UD Almería. Lo cierto es que el cuadro de Fernando Soriano se mostró serio en defensa para, en el minuto 4, dar el primer aviso por medio de Sebastián Dubarbier. El argentino condujo con velocidad y la puso al segundo palo, superando al defensa azulgrana, para que Quique disparara sin acierto. El balón se marchó fuera, tras tocar en el palo izquierdo de la meta de René Román.
Tenía más balón la Llagostera, pero no sabía usarlo en las inmediaciones del área de Casto, si bien apareció en un par de ocasiones pisando el área rojiblanca. En ese espacio, el cuadro rojiblanco ya había probado fortuna en un par de ocasiones, también sin acierto por parte de los lanzadores rojiblancos.
Lo cierto es que el Almería manejaba bien el partido. Seguro en defensa, hacía la transición rápida para tratar de sorprender al equipo gerundense. En el minuto 17, Fran Vélez condujo el balón hasta la frontal del área y su disparo, tras rozar en Escassi, se fue por la línea de fondo. Sacado este, el remate de Michel Macedo, de chilena, se fue al lateral derecho de la red de la meta local.
Balón largo o llegada
La Llagostera buscaba la espalda de la línea defensiva con balones largos ante un Almería que robaba y tenía el balón, sin descuidos, presionando muy arriba la salida de balón del equipo de Oriol Alsina, con mucha dificultad para salir con el balón controlado. En el 24, Morcillo remató por encima del larguero un córner lanzado al primer palo
La obligación local le hizo acercarse en contadas ocasiones, buscando la banda izquierda de la UD Almería, pero sin acierto en el centro al área. En el 28, un remate de Juanjo lo despejó con la cabeza Ximo Navarro, con Casto a la espera, detrás, por si las moscas. En el 38, sin embargo, llegó un gol que no subió al marcador, pero que pudo hacerlo. Imaz aprovechó un balón a la espalda de la defensa para marcar, pero Ais Reig, a instancias de su auxiliar le quitó validez.
El Almería no dejó de creer y de acercarse al área de la Llagostera en los minutos finales, prolongándose los disparos, el más claro fue de Kalu Uche, tras un centro de Michel Macedo, que el nigeriano remató de cabeza para el lucimiento de René que metió una mano providencial que evitó el primer gol del partido, en el 43. En el 44 fue una cabalgada de Ximo Navarro la que acabó con disparo de este atajado por el meta azulgrana justo antes de llegar al descanso, tras una buena primera parte de los rojiblancos que, pese a la ausencia del gol, marcó el ritmo del partido.
Sufrimiento
La Llagostera propuso otra cosa en el comienzo de la segunda parte, jugando más en campo de la UD Almería y, aunque los rojiblancos tuvieron sus acercamientos con disparos tímidos, la entrada de Natalio por banda derecha acabó con un centro a la frontal que Imaz mandó por encima del larguero, aproximando el peligro.
Había perdido el sitio el Almería, pero cuando salió con rapidez pudo sorprender en el minuto 65, con un centro al área que dejó a Quique González con ventaja para rematar de cabeza un pase de Sebastián Dubarbier, pero se marchó fuera, con René Román batido.
El Almería perdía los duelos, estaba impreciso arriba, no actuaba con la misma solidez atrás que en la primera parte y eso perjudicaba el intento de buscar la portería defendida por René Román. En el minuto 76, una acción de Dubarbier acabó con disparo de este con la derecha y el balón se fue fuera, cuando tenía hueco para el gol.
Morir en campo rival
En el último cuarto de hora, la Llagostera buscó, con la entrada de Emilio y Chumbi, aire fresco en el centro del campo y en la delantera buscando una victoria, único resultado válido para seguir peleando. El Almería buscó matar el partido a la contra y pudo hacerlo, en el 88, en una acción de Chuli que encaró al defensor y el pase para Quique, que entraba solo por la banda izquierda, tardó el pucelano en definirlo y su disparo, tras dar en Edu Oriol y en el palo, se marchó a saque de esquina.
El Almería no cesó en su empeño en buscar la victoria y pudo lograrlo en el 90, en el saque de esquina que remató primero Morcillo y el balón le cayó a Quique González que volvió a encontrarse con la madera. Otro palo, añadido al hecho de volver a la zona de descenso a la espera de dos victorias y una carambola para no sufrir.
Un empate que obliga al Almería a rezar
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