Eldin, exzaragocista, entra en la lista
PABLO LAYNEZ | ACTUALIZADO 29.08.2015
Quique y Soriano descargan sus maletas del coche para subir al autocar.
Apetece. Apetece y mucho ver al Almería ante su primera gran prueba de fuego de la temporada. Apetece bastante ver cómo se desenvuelven los rojiblancos en un estadio de Primera como La Romareda ante un público que va a ejercer una presión asfixiante. Apetece un mundo comprobar el verdadero potencial de los de Sergi frente a un conjunto confeccionado también para el ascenso. Amaneció la pasada semana y aunque todavía es temprano, el Almería tiene la obligación de ponerse todos los despertadores para estar con los ojos bien abiertos. Y no es precisamente por la hora del partido, un ataque a los aficionados al deporte, sino por tratarse de la segunda jornada.
Con el casillero ya estrenado y después de haber agradado y mucho frente al Leganés, los rojiblancos van a La Romareda con mucho que ganar. Sin embargo, el primer partido fue engañoso por la endeblez defensiva madrileña y por cómo se cayeron los de Sergi en los minutos finales, sobre todo cuando Fatau y Corona se marcharon del campo. Sergi ha insistido en ello durante la semana e incluso se le vio molesto en los primeros entrenamiento por la excesiva relajación de los suyos con el 3-0 en el marcador. Aunque el síntoma no es preocupante, lo mejor es sanarlo esta misma noche para que no se enquiste.
El partido de esta noche se va a jugar donde más le gusta al Almería, en el centro del campo. Los maños, con el exrojiblanco Popovic en el banquillo, han vuelto a confeccionar un equipo más fuerte y poderoso que técnico, por lo que no les importará que los de Sergi tenga el balón. En pretemporada y los minutos que los almerienses quisieron jugar frente al Leganés, maravillaron con el control del partido. Si el dominio es fructuoso y las bandas encuentran huecos en las líneas mañas, el Almería tendrá mucho ganado. Así será fundamental nuevamente el fútbol menos vistoso pero más efectivo de Chuli y la pegada de Iago y Quique. Además, Eldin ha entrado por vez primera en la convocatoria una vez recuperado de su lesión y es más dinamita para el ataque almeriense.
La única duda estriba en el centro de la defensa. A Fran Vélez se le vio nervioso y menos seguro que de costumbre el pasado domingo, por lo que puede dejar su puesto a Carlos Cuéllar. El madrileño ha terminado ya su plan específico de forma y tuvo unos minutos hace una semana para ir cogiendo la forma. Sea quien sea quien acompañe a Morcillo, la zaga debe de dar firmeza al resto de líneas.
Desde que amanece
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