La UD Almería quiere volver a la senda de las victorias, con Hemed entre los convocados, para visitar al RCD Espanyol
JUANJO AGUILERA | IDEAL ALMERÍA
Aunque tradicionalmente siempre se ha hablado de que son cinco los sentidos, hoy en día se distinguen más y quienes saben manejarlos están más cerca de conseguir sus metas. La UD Almería está obligada hoy a no bajar ni un ápice el listón que habla de los cinco, con diferentes acepciones a las normales, pero también de otras igualmente importantes para tratar de volver a la senda de las victorias, ese camino que puede y debe acercar a los almerienses al objetivo de una permanencia que no está lejos, por tiempo y distancia, pero que requiere de no errar. El viernes, decía Juan Ignacio Martínez, que no hay margen para el error, pese a que la cita no es una final, con aún 18 partidos más en el frente. De lo que sí hay obligación es de no 'anclarse' en estos puestos delicados de la clasificación que ocupa el equipo en la actualidad, por más que la distancia sea, por ahora, escasa.
De todas formas, esta UD Almería tiene hoy enfrente un rival al que las estadísticas le sitúan como un equipo peligroso de un tiempo a esta parte. Decía Juan Ignacio Martínez, en su comparecencia del pasado viernes, que este RCD Espanyol consigue ganar casi el 70% de sus partidos en los últimos minutos. No hacía falta que lo contara. La UD Almería que comenzó esta temporada precisamente ante el RCD Espanyol está hoy en zona de descenso, entre otras cosas, por los dos puntos que por un descuido se perdieron en el último minuto del encuentro disputado en la primera vuelta en el Estadio de los Juegos Mediterráneos, en el comienzo de la presente temporada.
Se perdió por esos cinco o más sentidos que se necesitarán hoy para sumar la victoria. Aquella fue la noche del apagón, el eléctrico -durante casi un cuarto de hora no hubo luz en un sector del Estadio- y el deportivo que dejó a Sergio García 'amasar' el gol, darse la vuelta y disparar con comodidad al fondo de las mallas del ahora lesionado Rubén Martínez para sacar de las 'entrañas' del Estadio de los Juegos Mediterráneos las 'sábanas' del fantasma de la pasada temporada.
Con todo en la maleta
En esta cita dominical en el Power8 Stadium de Cornellá, la UD Almería debe 'ver' el partido, para leerlo; estar atento a los sonidos, 'oírlo', porque la cita esconde muchas cosas; 'oler' lo que pueda pasar, el miedo y el olor a triunfo; tener 'tacto' para, si ocurre lo que en los 89 primeros de la ida, no perder la cabeza por si alguno se la 'rompe' en ese minuto 90, y lo último, saborearlo, ojalá que después de conseguir el triunfo, que sería un alivio.
Pero la cita de esta tarde también necesita de otros sentidos como el equilibrio, la concentración -sobre todo concentración-, para no provocar descuidos que el fútbol del Espanyol o, para ser más exactos, quienes lo ejecutan suelen aprovecharlos a las mil maravillas.
La semana no ha sido buena para la UD Almería. El técnico rojiblanco afronta el choque sin nada, en lo positivo, aunque en lo negativo hay mucho. La 'habitación de las bajas' sigue demasiado poblada o ha tenido demasiadas visitas. Durante la semana han pasado por ella los 'habituales' Rubén y Quique González, a los que se unieron el pasado miércoles Tomer Hemed y Ximo Navarro, dos jugadores muy importantes. El primero lo es porque sus goles 'le delatan' como el jugador que se esperaba cuando se le fichó, el pasado verano, y el segundo porque su polivalencia y la capacidad para alcanzar un nivel más que óptimo en la posición en la que sea ubicado es un lujo, sin lugar a dudas, para un club como el rojiblanco.
El tailandés Teerasil Dangda ya es historia, desafortunadamente para él y para la UD Almería. Durante un tiempo se han alimentado mutuamente en lo que concierne a sus sueños, sin que el primero diera la talla para lograrlos, ni el segundo se valiera de lo que esperaban.
Por fortuna, para la plantilla, el entrenador rojiblanco ha contado esta semana con Michel Macedo, lo que amplía el cupo de jugadores utilizables en defensa y 'alienta' la posibilidad de que Ximo Navarro despliegue el abanico de su polivalencia para utilizarle por donde Juan Ignacio Martínez quiera. De todas formas, las secuelas del partido de la pasada semana en Mestalla ayudan a pensar en la posibilidad de salir en Cornellá con los mismos cuatro de atrás que empezaron ante el Valencia. Así, Ximo Navarro estaría por la derecha y Dubarbier que, cuando no estuvo propició la presencia del anterior en banda izquierda y la de Michel Macedo en la derecha, lleva dos partidos como titular en el carril izquierdo. El centro es cosa de Ángel Trujillo y de Fran Vélez, un jugador que el pasado año se 'alimentó' precisamente en campo del Espanyol para estar ahora en la primera plantilla y alimentó las ilusiones de la UD Almería de estar en Primera División una temporada más.
Con los mismos
El partido no ofrece motivos para realizar excesivos cambios con respecto al once inicial de la pasada semana. La vuelta de Hemed supone una gran alegría para el equipo rojiblanco, del que se cae Mané para que pueda entrar el joven canterano Dani Romera. Ambos movimientos pueden tener lecturas clarificadoras. La presencia del delantero de La Cañada, que el pasado domingo marcó dos goles contra el Cacereño, apunta a ser ya una realidad hasta final de la Liga ante la posibilidad de no fichar un jugador de esa demarcación en el mercado de invierno; la del gaditano le señala para precisamente estas fechas, a una semana del cierre, con lo cual podría estar cerca la llegada de ese refuerzo para le lateral zurdo.
En cuanto al resto once, está claro que Verza y Thomas son los hombres que forman en una sala de máquinas que funciona mejor desde que por delante tiene a un jugador de la calidad de Miguel Ángel Corona, lo único que tal vez se le pudiera echar en cara a Francisco durante su etapa, la ausencia del talaverano, que llegó justo en Copa, en el enfrentamiento en el Benito Villamarín, para quedarse en el once del que es una pieza importantísima en los buenos momentos del equipo.
Para arriba, en Valencia jugaron Wellington Silva y Édgar, cambiando sus posiciones en banda, con el 'torpedo' Hemed, que no solo puso la firma a los dos goles de la UD Almería, sino que también hizo temblar a la portería defendida por el ex de la UD Almería, el brasileño Diego Alves.
En línea ascendente
El rival de la UD Almería no es ni parecido, siquiera, al que visitó el Estadio de los Juegos Mediterráneos el pasado mes de agosto. Poco a poco, el equipo ha cogido las formas de Sergio González hasta situarse como líder del 'pelotón de los torpes y sus 23 puntos le dan cierta tranquilidad, a siete puntos de la zona de descenso que, curiosamente, 'lidera' ahora el equipo de Juan Ignacio Martínez.
Qué duda cabe que un triunfo hoy le daría más 'vida' al conjunto españolista, metido de lleno en el frente liguero y, más si cabe, en la Copa del Rey, en la que la victoria del pasado jueves dio un empujón moral a los periquitos, que exhiben un fútbol preciso en sus combinaciones y sólido en la recuperación y en la defensa. Pero si en algo destaca ahora el cuadro blanquiazul es en su pegada. El idilio del delantero ecuatoriano Felipe Caicedo con el gol -suma cuatro dianas en los últimos tres choques- se suma al rendimiento constante de Sergio García y del uruguayo Cristhian Stuani. La competencia en la parcela ofensiva es total. Ambos apuntan a formar la dupla de ataque.
Es segura la ausencia del lateral derecho Anaitz Arbilla por acumulación de tarjetas amarillas, además de quedarse fuera, con respecto a la convocatoria copera, Mattioni y el almeriense Duarte. Sin embargo, Abraham, Fuentes y Javi López, que descansaron frente al Sevilla en Copa, regresan a la convocatoria para el partido de hoy y serán titulares en el conjunto perico, un equipo que pide estar con los cinco sentidos puestos y puede que algo más.
Con algo más que los cinco sentidos
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