REDACCIÓN | DIARIO DE ALMERÍA
Después de noventa y tantos minutos de batalla, marcar en el descuento y llevarse en la saca los tres puntos es el mejor bálsamo para emprender el viaje de vuelta con la satisfacción del trabajo bien hecho. En esos momentos ni siquiera se perciben los dolores musculares habituales postpartido, es todo alegría y felicidad.
El vestuario rojiblanco sabe que la fe mueve montañas y ayer no la perdió hasta el último instante, tal y como recordaba el protagonista del encuentro, Édgar Méndez: "Sabemos que tenemos que sufrir y trabajar más que el rival para ganar. La recompensa del trabajo han sido los 3 puntos y hay que pensar en el Elche. En el gol tuve fe y fui a por todas, es cierto que tocó en el defensor, pero lo importante al final es sumar".
El extremo tinerfeño describía la alegría en la caseta y su gran momento personal: "El vestuario está muy contento, sumar siempre es positivo y un punto tampoco estaba mal. Nos vamos muy satisfechos. Voy a seguir trabajando, si estoy al 100% ayudaré al equipo para intentar salvar la categoría afrontando cada partido como una final para nosotros".
Sebastián Dubarbier se congratulaba de que el asalto ante un rival directo hubiera caído de su lado: "Estábamos los dos peleando cansados y había que evitar las contras atrás porque alguna íbamos a tener. Fue un partido en un campo difícil y nos vamos muy contentos. Seis puntos en tres partidos está muy bien. Lo importante es estar fuertes y sólidos atrás, ojalá que sigamos así.
Verza, que por tercera vez consecutiva ejerció de capitán, reiteraba que la fortuna suele sonreír a los más audaces: "Esta vez tuvimos la suerte que no tuvimos en otros partidos como ante el Espanyol, cuando nos hicieron un gol igual. Supimos sufrir cuando el Depor apretó y con algo de fortuna nos llevamos tres puntos de oro".
El centrocampista oriolano incidió en la mejoría defensiva experimentada por el equipo. "Hemos mejorado en la faceta defensiva, todos defendemos y ataca la gran mayoría para seguir creciendo esto nos da un plus y mucho ánimo".
La fe mueve montañas
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