Duelo ante un rival directo que se maneja como nadie en la brega y la confrontación
PABLO LAYNEZ | DIARIO DE ALMERÍA
Si a cada equipo de la Primera División hubiese que definirlo en pocas palabras, prácticamente todos los aficionados rivales calificarían al Levante como experto de la pillería o la fullería. Hace ya varios años, cuando los granotas estaban inmersos en una grave crisis económica que casi les cuesta la desaparición, la junta directiva optó por fichar a jugadores veteranos y perfectamente conocedores de las diferentes artes del fútbol. Quizás el ejemplo más claro de esta política es Juanfran, que ya en la ida en el Mediterráneo sacó parte de su repertorio y desquició a un Almería que iba ganando el partido por 2-0 y acabó empatándolo.
Esta forma de entender el fútbol, en la que prima el músculo, a veces el engaño, pero sobre todo el resultado por encima, es la antítesis de lo que quería Francisco en su desembarco en la Liga BBVA el pasado verano. El míster almeriense llegó con la idea de agradar, de practicar un fútbol abierto y alegre para el espectador, hasta que a base de palos se ha dado cuenta de que para los humildes eso es una utopía. Poco a poco, los rojiblancos se han vuelto más conservadores, más prácticos y esta tarde tendrán una prueba de fuego en la que deben demostrar que también saben atarse los machos cuando la ocasión lo necesita.
Para sumar cuanto menos un punto en un Ciudad de Valencia que no se da nada bien en Primera, los rojiblancos tendrán que cargarse de paciencia, no entrar en el cuerpo a cuerpo que buscará el Levante y, sobre todo, no descuidar la marca sobre Barral en las contras y en los balones colgados al área, las dos principales virtudes valencianas, equipo que tendrá las bajas esta tarde de Nikos, Vyntra, Andreas Ivanschitz y El Adoua, además de la duda de Juanfran.
Tras el triunfo ante el Atlético de Madrid, la carga de moral de la tropa almeriense ha sido enorme tanto por ganar al líder como por la fortaleza que está demostrando el equipo en las últimas semanas en el Estadio de los Juegos Mediterráneos. Sin embargo, ahora le está costando sacar buenos resultados fuera de casa, algo poco habitual en el Almería. Y el partido de esta tarde tiene una carga de importancia muy grande, puesto que el Levante es un equipo que también lucha por mantener el descenso a raya y suele dejar escapar muy pocos puntos de su estadio.
Para cortar la sangría de los partidos anteriores lejos del Mediterráneo, Francisco y sus pupilos saben que esta tarde tendrán que estar en guardia los noventa y pico minutos que va a durar el choque. Últimamente, el míster estaba apostando por un trivote en el centro del campo, pero ante el Atlético de Madrid tuvo que desechar la idea viendo el poco resultado que estaba dando. Sin embargo, la baja por sanción de Soriano puede volver a colocar a Tébar junto a Verza y Azeez, o pasar a Suso a la mediapunta y Barbosa entrar en banda. Rodri y Nelson, que está terminando su recuperación, también son baja.
Una tarde de jugar al otro fútbol
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