Rodri, Suso, Torsiglieri y Nelson han aterrizado a la entidad rojiblanca en calidad de cedidos
N. GARCÍA | DIARIO DE ALMERÍA
La filosofía de la UDA, de comprar barato y vender caro, le está saliendo bien en la última época. En tiempos de crisis, Alfonso García ha optado por la opción más lógica, que se ha acentuado este verano. La entidad rojiblanca no se ha gastado nada en los ocho refuerzos invernales.
Dubarbier vino gratis, ya que, aunque le quedaban dos cursos más en el Córdoba, la entidad califal renunció a esos dos años, asegurándose el 50% en un posible traspaso. Óscar Díaz también tenía contrato con el Lugo, pero ambos clubes llegaron a un acuerdo. Marcos Tébar acabó su relación contractual con el Girona y Ustari llegó gratis procedente del Boca Juniors.
Las otras cuatro incorporaciones, Rodri, Suso, Torsiglieri y Nelson, han aterrizado en Almería en calidad de cedidos, por el Barcelona, Liverpool, Metalist y Palermo, respectivamente.
El club rojiblanco quiere gastar lo menos posible, consciente de que tan importante es el aspecto económico como el deportivo, y sabiendo que el dinero no garantiza la permanencia. Eso no quiere decir que si hay que pagar una determinada cantidad por algún futbolista, se haga. Pero la realidad es que los traspasos millonarios de otros tiempos, como el de Piatti, ya no se dan. Que la base esté cobrando más importancia, con la correspondiente plantilla corta, también influye.
Ocho incorporaciones veraniegas a coste cero
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