domingo, 26 de mayo de 2013

Dos duelos para ser segundos

Los de Javi Gracia golean al Alcorcón con tres remates entre los palos y tres goles. La afición, espectacular, no paró de animar
RAFAEL ESPINO ALCORCÓN | DIARIO DE ALMERÍA

Trujillo salta por encima de Miguélez para robarle el balón

Eficaces en ataque y correctos en defensa. No le hizo falta más al Almería para golear a un Alcorcón con más actitud que premio. Los de Bordalás, no sin razón, terminaron culpando a dos penaltis no señalados en el área del Almería (por manos) como el colmo de sus males. Con esta victoria de tres puntos, tres disparos y tres goles (por 11 remates del Alcorcón), los de Javi Gracia sentencian matemáticamente su participación en los play off y mandan la pelota al tejado de Villarreal y Girona, que necesitan ganar para seguir la estela de conjunto rojiblanco.

Como el Almería, o quizás más, el Alcorcón se jugaba la vida. Sus opciones de lograr la segunda plaza pasaban por ganar al cuadro de Javi Gracia. Así que con motivos suficientes, le echaron mas raza que los almerienses en el inicio. Juli, aquel futbolista que maravilló en el Poli Ejido sin dejar de correr, tiró de casta y lideró a los de Bordalás durante un buen tramo. De sus botas surgieron varias de las mejores oportunidades de los amarillos. En el primer minuto encontró hueco para disparar fuera del área, dos minutos después provocó una falta de Trujillo al borde el área y más tarde mandó un balón al palo tras centro de Sales.

Pero resulta que el Almería está teniendo ahora la suerte que echó de menos en jornadas anteriores. Hizo gol en pleno dominio del Alcorcón. Soriano buscó Aleix Vidal a la espalda de Nagore y Babin, este se llevó pelota, avanzó hasta casi pisar el área pequeña y le concedió a Charles el honor de marcar tras un pase de la muerte. Sin fútbol y con una sola ocasión, los rojiblancos mandaban en el marcador, pero no en el campo, donde fueron claramente inferiores durante casi todo el primer tiempo.

Los amarillos reclamaron en apenas 15 minutos dos penaltis, ambos por manos, una de Gunino y otra de Pellerano. En el campo sí que lo parecieron. Después del tanto del pichichi Charles, Sales tuvo el empate en un disparo raso tras pase de Oriol y después mandó el balón por encima del larguero tras empalmar el balón de volea. Esteban tuvo que trabajar de lo lindo para ganarse el sustento y al igual que él, los laterales, pues la movilidad e intercambio de posiciones de Sales, Juli y Oriol Riera despegaron la pegatina que esconde algunos de los errores de la defensa del Almería que, si embargo, supo desvirtuar y bloquear los intentos del Alcorcón cuando solo les faltaba darle la puntilla a la jugada. El asunto estaba en cuánto se aguantaría así.

Quien pensara que en el segundo tiempo el Almería sufriría menos, se equivocó. El periodo comenzó tal y como acabó el anterior, con una avalancha amarilla. En el 46 Oriol remató a apenas dos metros de Esteban, que detuvo en el palo corto. Después, Nagore lanzó arriba una falta desde el borde del área. Pero en el guión del partido estaba escrito que el Almería asustara de vez en cuando y gozo de dos ocasiones prácticamente seguidas. La primera, en el 56, de Trujillo. Su remate de cabeza merced a una falta botada por Corona se fue lamiendo el larguero. Dos minutos después, Charles calcó la finalización. No hubo suerte, había que seguir sufriendo. Cada minuto era una agonía porque aunque los locales no finalizaran sus jugadas, no pararon de rondar el área de los almerienses.

Rápidamente, Bordalás entendió que debía dar más brío y pegada a su equipo y dio entrada a Sergio Mora y Dani Nieto. La reacción de Javi Gracia fue poner sobre el césped a Jonathan, que no jugaba, por lesión, desde el choque ante el Hércules. Y fue entrar el burkinés y el gol apareció como nunca. Verza galopó solo en una contra, vio a Vidal desmarcado en la derecha y este se la puso a placer a Fernando Soriano. Eso fue en el 69. Diez minutos después, el guardameta del Alcorcón, Manu Fernández, erró como pocas veces al despejar un balón sin aparente complicación, le resbaló mas que goleó y se la puso a escasos metros a Charles, que vio desierta la portería y no se lo pensó. Hizo su gol número 25 en el campeonato, abriendo brecha con el madridista Jesé.

Lo que restaba de partido no ofreció mucho más. El Alcorcón, ya derrotado, cayó en el desánimo y, aunque no paró de buscar el área rival, las ganas no eran las mismas. Apenas una oportunidad más de Sales, con un disparo flojo que no le costó atajar a Esteban, fue todo el honor que le pusieron los amarillos, que veían como se les escapaba la posibilidad de ascender a Primera División de forma directa. Algo que sí tiene a tiro el Almería. Con empatar ante el Girona en casa, llegaría con vida al último encuentro que se disputará en el Madrigal ante el Villarreal. Esa podría ser la tarde en que el Almería volvería a movilizar a una provincia con el fin de regresar junto a los más grandes. El próximo capitulo se escribe el próximo domingo ante e l Girona en el estadio Mediterráneo
Dos duelos para ser segundos

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