Otra final contra una roca

El Almería, rival del Murcia hoy, solo ha cedido dos empates en casa
JOSÉ OTÓN / laverdad.es

Gustavo Siviero no para de dar vueltas al once inicial que pondrá en liza esta tarde en Almería. Por un lado, el técnico argentino quiere mantenerse fiel a sus principios aunque tenga enfrente un rival que asusta, que mete miedo. El hecho de que casi nadie haya podido rascar puntos del estadio almeriense invita al Real Murcia a ser precavido, aunque quizás ese haya sido el motivo por el que casi todos los equipos que han pasado por allí se hayan ido sin nada.
«Si vas a empatar, perderás», suele decir el valiente técnico del Real Murcia. Y es que solo el Hércules y el Mirandés consiguieron esta temporada empatar en Almería, aunque no marcaron ni un solo gol, dejando este honor al Xerez, único equipo que lo ha hecho desde que arrancó la Liga en el estadio que visita el Real Murcia hoy.
Por eso, y sin miedo a convertirse un equipo más de los que ha caído frente al equipo de Javi Gracia, el técnico de Santa Fe puede partir de inicio con el mismo 'once' que presentó ante el Barça B. Un equipo titular que buscará robar el balón al Almería y manejar el tiempo del partido. Según el último ensayo en Cobatillas, Siviero mantendrá la línea defensiva, el centro del campo y la delantera, aunque ya tiene a Cristian García preparado para escudriñar y rascar en una línea defensiva local en la que estará el madrileño Álvaro Mejía, exmurcianista.
Tagliafico y Molinero serán de nuevo los laterales, y Dos Santos y Catalá ocuparán el centro de la zaga, siempre que el argentino no se resienta de sus molestias en los isquiotibiales, algo que parece improbable tras la dura sesión física a la que sometió Juan Manuel Alfano, preparador físico grana, a los soldados murcianistas antes del choque de esta tarde en el Juegos Mediterráneos. Dos Santos la aguantó sin problemas, aunque Siviero probó ayer algunos minutos a Jorge con los titulares por si Mauro Dos Santos recayera.
El centro del campo será para Nafti y Matilla, acompañados en una banda por Sutil y en la otra por Emilio Sánchez, un jugador que ha dado la talla en esta posición tanto en El Madrigal como la pasada semana en la Nueva Condomina. Jonatan Gómez y Nico Martínez, que no están todavía al cien por cien, estarán esperando para sustituir a Emilio y Sutil respectivamente. Donde parece tener más dudas el Pájaro es arriba, en la delantera, donde quiere empezar hoy a ganar a un rival directo por alcanzar la Primera División en junio.
Si bien probó en los ejercicios de ayer de inicio con Saúl y Kike García en el supuesto once titular, a los pocos minutos le dio entrada a Cristian García por el jugador manchego, que no cubrió dos de las sesiones celebradas por el equipo grana esta semana debido a problemas musculares, concretamente en los isquiotibiales. Además, el técnico de Santa Fe prepara un plan B por si su equipo necesita más madera en el centro del campo o si preservar aguantar el resultado como la pasada semana frente al Barça B, sustituyendo a Saúl Berjón por el canterano Eddy, que ya jugó en esa posición la pasada semana, lo que le daría al Real Murcia más presión, intensidad y más músculo.
Eso sí, donde vuelve a recaer todo el morbo es en la lista de convocados que el técnico argentino dio ayer para este partido. No viajarán a Almería Mario Marín, Albiol, Acciari y Chando, que se está acostumbrando a tener libres los fines de semana. El delantero balear no encaja en el sistema de juego de Siviero, no cumple con el trabajo defensivo y la polivalencia que demanda el entrenador grana a sus delanteros, y no posee el toque de balón que precisa para unirse a un grupo de jugadores que apuestan por retenerlo siempre. Chando tiene otros puntos fuertes como la colocación, la intuición o el remate, cualidades que, de momento, no le valen al argentino.
Un club 'murcianizado'
El Real Murcia, tras mostrar dos caras en los primeros compases de la temporada, necesita salir de pie de uno de los estadios más complicados de Segunda para seguir soñando con el ascenso. El equipo de Javi Gracia es el cuarto equipo más goleador de la categoría (marcó 23 goles) y a su vez el cuarto menos goleado con solo 13 goles encajados, unos guarismos atrás que se parecen a los del Real Murcia. El equipo grana necesita hacerse fuerte lejos de casa y esta tarde tiene una oportunidad grande de aparcar los fantasmas que lo encorsetaban como un equipo que a domicilio se muestra débil y fácil de superar por su falta de intensidad. El punto de El Madrigal, o las contundentes victorias en Gijón y Jerez deben mostrar el camino, acompañados por un Real Murcia que debe seguir siendo un conjunto fiable en casa, donde ha tumbado a equipos como el Elche, el Racing o el Barça B.
El Almería es un equipo joven pero que en apenas veintidós años de vida ya ha conseguido lo que el Real Murcia no ha logrado en toda su historia. Desde la fundación del actual Unión Deportiva Almería, en el año 1989, el club rojiblanco consiguió recientemente militar cuatro temporadas de forma consecutiva en Primera División, en la que llegó incluso a una semifinal de la Copa del Rey en la que fue vapuleado por un Barça con un Messi incontestable. Y es que el club grana, en sus casi cien años de historia, no ha conseguido nunca afianzarse en la élite, y solo consiguió estar en Primera tres temporadas consecutivas en la década de los ochenta, con José Pardo Cano como presidente.
Desde su fundación en 1989, el Real Murcia ha visitado en siete ocasiones tanto en el estadio Juan Rojas como en el nuevo Estadio Juegos Mediterráneos, más coqueto y más grande.
En los siete viajes que desde entonces el club grana ha realizado a Almería, solo ha conseguido arañar un empate, perdiendo en todas las demás. En Segunda B, el único enfrentamiento entre ambos se produjo en la temporada 1997-1998, un choque que perdió el equipo grana por 2-1. Esa temporada ambos conjuntos acabaron en mitad de la tabla.
En la siguiente visita grana, el equipo que dirigía David Vidal arrancó un empate, en una temporada en la que el Real Murcia acabó subiendo a Primera División como campeón indiscutible de Segunda.
Después todo han sido derrotas. En la 2004-2005 cayó por 1-0, en la 2005-2006 por 2-0, y en la 2006-2007 sucumbió por 2-1, con Unai Emery en el banquillo local y Lucas Alcaraz en el visitante, en una campaña en la que los dos, junto al Valladolid, acabaron subiendo a Primera en lo que ha sido el último ascenso grana a la élite. En la siguiente temporada entre los grandes el Real Murcia cayó por 1-0, siendo el último enfrentamiento el de la temporada pasada, en un partido en el que el equipo que entrenaba Iñaki Alonso empezó ganando con un golazo de Molinero y acabó derrotado de forma clara y contundente por cuatro goles a dos.
Lo paradójico es que el Almería se ha paseado por los campos de Primera dirigido por murcianos. El empresario aguileño Alfonso García y Ricardo Martínez, ligado al Real Murcia en diversas facetas desde antes de 1976, han construido en Almería un proyecto basado en la cantera y en rentabilizar fichajes como el de Felipe Melo, traspasado al fútbol italiano, Piatti y Alves, vendidos al Valencia, o jugadores como Negredo, que llegó al equipo rojiblanco siendo un desconocido y que ahora brilla en el Sevilla y en la selección española. Para devolverlo a Primera, los murcianos que dirigen al rival del Real Murcia hoy han elegido a Javi Gracia, un entrenador joven que ha pasado por el Pontevedra, el Cádiz, el fútbol griego o por el filial del Villarreal.
La buena notica ayer llegó para el Real Murcia en Las Palmas y en Guadalajara donde el Córdoba y el Recreativo, dos equipos que luchan con el equipo grana por auparse en la zona alta de la tabla, perdieron y permitirían a los de Siviero escalar posiciones si ganan esta tarde al Almería, un equipo que es una roca, un muro, en un territorio, hasta ahora, hostil para el murcianismo.
Otra final contra una roca