PACO GREGORIO / DIARIO DE ALMERÍA
La Unión Deportiva Almería lleva 36 partidos remando y no quiere morir en la orilla, pero el cansancio acumulado empieza a pasar factura a algunos componentes del plantel, tal y como ha reconocido el propio Leo Ulloa: "Somos una plantilla corta, hay algunos jugadores que se encuentran mejor que otros en la fase final y eso es bueno. Otros estamos más cansados. Yo me siento un poco cansado por el campeonato en sí, lo siento un poco. Intentaré trabajar para llegar de la mejor forma posible".
La sinceridad del pichichi de la categoría ha hecho saltar todas las alarmas, ahora que el equipo debe afrontar seis partidos decisivos en el estrecho margen de tres semanas en busca de disputar el play off.
Y una vez conseguida dicha meta tampoco conviene olvidar que serían necesarios cuatro duelos de máxima exigencia para devolver al equipo a Primera División, un objetivo posible pero no exento de dificultad con un plantel en el que 14 futbolistas de campo acumulan casi todos los minutos.
La imposibilidad de hacer rotaciones al poseer un equipo tan escaso de efectivos es una de las causas principales, mientras que la aportación del filial podría calificarse de testimonial, pues solo el burkinés Jonathan está contando realmente.
Los unionistas acumulan cuatro jornadas sin perder, pero únicamente han sumado una victoria (2-0 al Deportivo) en los últimos once enfrentamientos ligueros, un balance que sigue despertando muchas dudas.
Con todo, jugadores como el ariete argentino prefieren quedarse con lecturas positivas como que se está recuperando el equilibrio en la parcela defensiva a costa, eso sí, de ver con mayor dificultad la meta contraria. Tres goles a favor y dos en contra es el balance desde que el entrenador malagueño se hiciera cargo del banquillo.
"Lo mejor es que defensivamente estamos espectaculares y los dos últimos partidos nos han dado mucha confianza en ese aspecto. Si no te encajan, no te crean ni te llegan es muy bueno para el equipo. Ya volveremos a meterla, siempre hemos hecho goles", relata el de General Roca.
Al aludir al punto cosechado en el Rico Pérez recalcaba el desgaste que supuso: "Vengo de los últimos partidos bastante cansado, fue un partido difícil y trabado. Al menos se sacó un punto y seguimos ahí peleando. Tuvimos pocas ocasiones al igual que ellos y el empate fue lo más justo. Vamos sumando y con la portería a cero, nos faltó 'punch' arriba para poder concretar alguna o crear más. Ante el Depor estuvimos más frescos, pero el punto es bueno".
El atacante lamenta que el árbitro no les señalara ninguno de los dos penaltis reclamados: "No sé si el de Rafita fue, pero la mano [de Gilvan] existe y desvía la trayectoria. El árbitro dice que la tenía pegada al cuerpo pero a nosotros nos han cobrado ya varias así, muchas. Creo que tenían que haberlo dado".
Temor a llegar fundidos
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