El más flojo es el más fuerte
Uno de los jugadores que más desquiciaron el pasado año a la afición, Diamanka, es el líder del Numancia, el rival del sábado
Del resto de ex no destaca ninguno
PABLO LAYNEZ
30 Agosto, 2017 - 02:32h
Diamanka conduce el balón el pasado sábado con el Numancia ante el Rayo Vallecano
La vida es caprichosa y el fútbol lo es más aún. ¿Cómo puede explicarse si no que uno de los peores futbolistas de la temporada pasada sea el líder del Club Deportivo Numancia y uno de los jugadores más destacados de este comienzo liguero de la Liga 1,2,3? Buscar una explicación lógica es complicada, sobre todo cuando hace menos de un mes que el centrocampista salió del Mediterráneo y arribó a Los Pajaritos. Sin embargo, Diamanka parece haber encontrado en tierras sorianas lo que le faltaba en Almería. Y en Zaragoza. Y en Vallecas también, estadio precisamente en el que anotó el gol el pasasdo sábado que le sirvió a los rojillos para sumar un punto.
A comienzos de agosto, después de no contar Ramis con él, Diamanka consiguió firmar su rescisión con el Almería. Apto seguido, firmó en su condición de agente libre con el Numancia, que estaba esperando agazapado para no tener que pagar cláusula por él. Desde el primer día, en Soria le esperaban como un todoterreno en el centro del campo, como un jugador que abarca mucho y tiene llegada. Lo mismo que pensaba Fernando Soriano que iba a aportar en Almería y nunca lo consiguió. Y no sería porque oportunidades no tuvo como rojiblanco. Pero su indolencia, su falta de ganas y su ritmo tan africano, lento y cansino, terminaron por exasperar hasta al más tranquilo de los aficionados del Almería, que no le perdonaron una puesto que veían cómo jugaba prácticamente por decreto.
Muy lejos del pésimo rendimiento dado en Almería, en Los Pajaritos ha encontrado su entorno. Jagoba Arrasate está sabiendo sacarle rendimiento y le ha convertido en el eje del equipo numantino, por lo menos en estas primeras jornadas. De hecho, lleva jugados 177 minutos de los 180 disputados hasta el momento y ya atesora un gol en su cuenta goleadora, algo que ni por asombro se acercó a anotar en Almería. Diamanka se ha situado junto al veterano Escassi, que está sabiendo taparle las carencias, para que el exrojiblanco se libere y llegue desde segunda línea al área rival. Así fue el pasado sábado frente al Rayo Vallecano, donde un balón robado por él mismo acabó en el tanto del 2-2. Diamanka no lo celebró, puesto que estuvo con más pena que gloria algunas temporadas en Vallecas. Ahora, este sábado, vuelve a enfrentarse a otro ex, como es el Almería, deseoso de demostrar lo que en su momento no pudo.
De todos los que salieron el año pasado, Diamanka era el que nadie esperaba que destacase en este comienzo liguero. Quizás, si uno hubiera hecho una quiniela, hubiera apostado por Quique o Antonio Puertas como las revelaciones. Nada más lejos de la realidad. El vallisoletano ha jugado los dos partidos íntegros con Osasuna ante Sevilla Atlético y Cultural Leonesa, sin efectuar ni un solo tiro a puerta y, por ende, sin marcar. Por su parte, el de Benahadux tan sólo disputó 31 minutos ante el Albacete y en el segundo partido en Zaragoza no tuvo la oportunidad de jugar. Dos de los máximos goleadores de la temporada pasada, de momento, no han conseguido estrenarse en estas dos jornadas.
De los delanteros a la portería. Casto fue otra salida que sorprendió y de momento no tiene clara su titularidad en la portería del Alcorcón. Si bien esta última jornada si la disputó ante el Cádiz, no encajando ningún gol, en la inicial jugó Javi Jiménez, dejado también su meta a cero. Julio Velázquez, un entrenador muy metódico está probando a ambos para decidirse.
Y los que sí lo han jugado todo, los 180 minutos, con un rendimiento muy dispar han sido Borja Fernández y Azeez. Al orensano nadie le discute la titularidad en el centro del campo ante un Valladolid que comenzó la campaña con una inesperada derrota ante el Barcelona B, y que supo sobreponerse el pasado fin de semana venciendo al Sevilla Atlético a domicilio. Por su parte, el nigeriano también es indispensable para Francisco, que ya en su temporada y media en el Almería le dio el bastón de mando en la medular en Primera División. Sin embargo, las cosas no le van bien a los dos exrojiblancos, que empataron en la primera jornada en casa ante el Reus y el domingo perdieron 2-0 en Huesca.
El más flojo es el más fuerte
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