Los rojiblancos vencieron en un campo impracticable con goles de Mamadou (2), Barbero y Calle.
En un partido que nunca debió jugarse, los rojiblancos de Esteban Navarro consiguieron una importantísima victoria frente a La Cañada en la tarde del sábado, que le hace seguir con su magnífica dinámica de juego y resultados. El encuentro estuvo marcado por la intensa lluvia que cayó durante todo el sábado en nuestra ciudad, en especial a la hora del partido, lo que hacía impracticable el desarrollo de un partido normal. En esa situación, los nuestros, más enchufados, con más moral, en mejor estado de forma y con más argumentos, mostraron desde el minuto uno su intención de adaptarse a lo que el encuentro le trajera.
En los compases iniciales del partido, Marcos saca un córner muy cerrado y Mamadou, muy enchufado en esta fase de la liga, se anticipa al portero y adelanta a los rojiblancos, ayer nuevamente de azul. El gambiano haría en la segunda parte otro gol, otra vez en una anticipación perfecta a defensa y portero, y conseguía así su tercer doblete consecutivo en liga, sumando así su séptimo gol de la temporada.
Antes de eso, el partido tuvo control rojiblanco, sin apenas llegadas del conjunto local que es un quiero y no puedo en las últimas semanas, con 6 puntos de los últimos 24 en juego, como decíamos, en dinámicas muy diferentes, pues el Almería suma una derrota en las últimas 16 jornadas y además están empezando a ver puerta con facilidad, que era el lastre de principio de temporada.
El 0 a 2 fue obra de Barbero, en otro balón parado, ayer muy productivo en un campo impracticable por la lluvia. Sexto gol para el roquetero, y pareja de ataque ideal para Mamadou, porque entre los dos suman ya 13 goles, y el rendimiento de ambos eleva el nivel del equipo.
Imperiales ayer en defensa Juanfra y Jordi Mola, en anticipación y corte, en ese tipo de partidos donde el balón se frena donde no lo esperas por las bolsas de agua, y teniendo en frente a un rival que cuelga casi cualquier balón y que tiene gente de altura para explotar sus armas.
A falta de 10 minutos para el final, el ordenador del equipo, Calle, se permitió una delicatessen en un tiro libre, y redondeó un marcador perfecto para los nuestros, borrando así cualquier atisbo de reacción o dudas en el marcador. Esfuerzo titánico de los visitantes para devolver al conjunto local la derrota de la segunda jornada y disipar así las dudas sobre el dominio en la clasificación entre ambos.
El próximo jueves 22, a las 12, se jugará el último partido del año frente a un siempre peligroso Granada en casa. Ahora toca descansar después de haber batido varios récords en la piscina de La Cañada, tales como; mejor visitante allí este año, portería a cero otra vez, planteamiento casi perfecto del míster Esteban Navarro, y sobre todo, 3 puntos más en su lucha por pelear por los puestos altos de la tabla.
JEl Almería se da un baño de goles en la “piscina olímpica” de La Cañada
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