El césped del Carlos Tartiere fue replantado días antes y provocó resbalones (Foto: Lorena Francos de Eldesmarque.com)
Que los partidos duran noventa minutos es algo que se pone de manifiesto cada jornada. Parecía que en una semana los fantasmas se habían alejado del seno de la UD Almería con la sensacional primera parte que los rojiblancos realizaron sobre el Carlos Tartiere. Posesión, presión, verticalidad y acercamientos fueron las características de los futbolistas almerienses durante la primera mitad, pero, tras la reanudación, los locales lograron superar a Casto y Diamanka complicó el intento de remontada al ver la segunda amarilla. Finalmente, el marcador se cerró con 2-0 e instala, de nuevo, el ‘deja vu’ en los encuentros con la presencia de la UDA.
La intención de Fernando Soriano quedó clara desde que se anunció el once inicial: superar a su rival en presencia en el centro del campo con la entrada de Diamanka en compañía de Ramón Azeez y Fran Vélez. Así, los atacantes tendrían mayor libertad para la salida en velocidad, lo que permitió un primer acto de dominio almeriense.
Solo habían transcurrido tres minutos y el Almería ya había llevado el peligro a la portería contraria en dos ocasiones. En el minuto 3, Chuli recibió un pase de Jonathan Zongo, pero el disparo del onubense fue desviado a córner, mientras que, en segunda ocasión, fue el de Burkina Faso quien mandó fuera un pase de Iago Díaz.
Fernando Hierro, durante los primeros toques de pelota, vio como la UDA estaba planteando el choque de la forma que él más temía, pues la presión en zona ofensiva de los de Soriano hacía imposible que sus futbolistas salieran con comodidad y cualquier error provocaba un contragolpe visitante.
Un cuarto de hora tardó en reaccionar el conjunto ovetense, aunque el dominio y el control de la situación mantuvieron el sabor andaluz. Eso sí, entre las idas y venidas de ambos contendientes, en el minuto 20, Toché remató fuera cuando tenía ocasión manifiesta de gol porque Casto estaba en el suelo como consecuencia de un resbalón.
Precisamente, el tramo del choque que coincidió con un menor ritmo de juego sucedió cuando mayor era el número de jugadores que se deslizaban por el rectángulo. El motivo fue que el césped del Carlos Tartiere se cambió unos días antes de la disputa del mismo, así que no estaba aún en condiciones óptimas.
En esas, se vio la mejor versión de la pareja en la medular formada por Ramón Azeez y Diamanka, pese a que este último sería protagonista para mal en el desenlace del duelo. Ambos futbolistas se hicieron fuertes en esa parcela del campo e impidieron el avance de los jugadores del Real Oviedo, lo que acabó derivando en que, con el paso de los minutos, las llegadas fueran recuperando el protagonismo de la UD Almería.
Tras una serie de acercamientos rojiblancos, a falta de un minuto para el descanso llegó la ocasión más clara entre palos de la primera mitad. Cuando el partido se encaminaba a los vestuarios, Iago Díaz mandó un centro desde la banda derecha que fue rematado por Chuli, en la frontal del área pequeña, al palo. Con 0-0 llegó el pitido del árbitro.
En la segunda parte todo cambió. Si el Almería dominó en la primera, el Real Oviedo, de Fernando Hierro, se lanzó sin contemplaciones a la búsqueda de incomodar a Casto. Sin tiempo para que los aficionados regresaran a sus asientos, en el minuto 53, Nando cogió la espalda a Fran Vélez y, tras marcharse de Trujillo, batió al portero del cuadro almeriense con un tiro cruzado.
Con el 1-0, lejos de recuperar el fútbol de los primeros cuarenta y cinco minutos, los problemas fueron en aumento. En el 61, Diamanka, que hasta entonces estaba siendo de los mejores, vio la segunda cartulina amarilla y dejó a los visitantes con un hombre menos, lo que permitió que la comodidad asturiana fuera en aumento.
Al Almería no lo quedó otra que lanzarse en busca de la portería de Juan Carlos para intentar lograr, al menos, el empate. En el minuto 80, Antonio Puertas, que acababa de entrar en sustitución de Chuli, a punto estuvo de hacer gol con un remate de cabeza, a centro de Corona, que se encontró con la mejor versión del portero que llevó, desde su llegada a la disciplina ovetense, a Esteban al banquillo.
Cuando más empeñado estaban los rojiblancos en acumular hombres en la zona ofensiva, Toché borró toda esperanza con el 2-0. Faltaban cuatro minutos para el final, cuando el atacante inició una jugada personal con la que se quedó ante Casto y no falló a la hora de poner la guinda.
La celebración del tanto, por parte de los locales, fue acompañada de las caras de circunstancias de los futbolistas almerienses, ya que, por una mal entrada en los segundos cuarenta y cinco minutos, el balance de las dos primeras jornadas de La Liga 1|2|3 dejan al Almería con un punto de seis posibles.
El Almería del pasado vuelve para que la gran primera parte quede en nada GO Deporte
Primera derrota de Soriano · Ambos equipos se mostraron muy verticales, aunque el Almería tuvo más presencia ofensiva
EFE | OVIEDO 27 agosto 2016
El Oviedo derrotó con solvencia al Almería en su estreno en el Tartiere, un encuentro que decantaron los goles de Nando y Toché y en el que los de Fernando Hierro fueron mejores que los rojiblancos, quienes además acabaron con uno menos tras la expulsión por doble amarilla de Diamanka.
Los primeros minutos de juego fueron para un cuadro andaluz que llegaba con facilidad al área de Juan Carlos, que tuvo que despejar un remate desde la frontal de Ramón Azeez primero y defender luego la meta de un potente disparo de Zongo que se fue alto por muy poco.
Ambos equipos se mostraron muy verticales y, aunque el Almería tuvo más presencia ofensiva, el Oviedo pronto ganó metros y dio visos de su potencial abriendo el juego a las bandas, lo que hizo que los rojiblancos tuvieran que esforzarse en ordenar las líneas en su propio campo y perdieran fuerza en área contraria.
El conjunto carbayón pudo anotar en una acción entre Pereira y Toché, pero el disparo raso del punta murciano se fue rozando el palo derecho de la meta de Casto, mientras que el Almería volvió a intentarlo al final de la primera parte, primero con una internada de Diamanka en área contraria que no remata nadie, y luego con un remate de Chuli a pase de Fran Vélez que repele el poste.
La lesión de Héctor Verdés en una acción con Juan Carlos supuso el debut de Óscar Gil, lateral procedente de Lezama que formó pareja de centrales con David Fernández al filo del descanso.
Tras la reanudación el Oviedo se mostró aún más vertical, y en una de esas acciones por la banda izquierda del ataque azul llegó el primer gol del partido, tanto anotado por Nando tras un magistral pase de tacón de Toché, cuya pared deja al valenciano en posición de encarar a Casto y lo bate con un disparo perfecto, ajustado a la derecha.
Las malas noticias no cesaron para el Almería con el tanto en contra, y a los pocos minutos los rojiblancos se quedaban uno menos al mostrarle Cordero Vega la segunda amarilla a Diamanka tras un forcejeo con el propio Nando.
Salvó el empate Juan Carlos en una ocasión a balón parado a favor del Almería que remata Antonio Puertas, y, por contra, acabó aumentando la distancia en el marcador el Real Oviedo a pocos minutos del final en una gran acción de Toché, que se deshace de sus marcadores y bate a Casto para poner el definitivo 2-0.
Real Oviedo: Juan Carlos; David Fernández, Fernández, Varela, Verdés (Óscar Gil, min. 45); Torró, Erice, Susaeta (Alanaiz, min. 82), Jonathan Pereira (Linares, min. 69), Nando y Toché.
UD Almería: Casto; Iago Díaz, Trujillo, Morcillo, Ximo Navarro; Fran Vélez, Diamanka, Ramón Azeez; Jonathan (Quique, min. 63), Fidel (Corona, min. 63) y Chuli (Antonio Puertas, min. 76).
Goles: 1-0, min. 53: Nando. 2-0, min. 86: Toché.
Árbitro: Cordero Vega, del colegio Cántabro. Amonestó a Nando, Jonatahan Pereira y Linares por parte del Real Oviedo, así como a Iago Díaz, Ximo Navarro y Morcillo de la UD Almería. Además, expulsó a Diamanka, del Almería, en el minuto 61 como consecuencia de dos cartulinas amarillas.
Incidencias: Partido correspondiente a la segunda jornada de La Liga 1|2|3. El encuentro se disputó en el Estadio Carlos Tartiere y contó con la presencia de 12.604 espectadores. Antes del inicio se guardó un minuto de silencio por los fallecidos en el terremoto de Italia.
Primera derrota de Soriano
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