28/08/2016 Tony Fernández
Este equipo ha cosechado la primera derrota de la era Soriano. La Nueva España.
La primera derrota de Soriano le va a venir bien al Almería. No esperen que critique el juego del equipo porque no he visto el partido. Solo le pediría al entrenador rojiblanco que borre el pasado de un plumazo porque el hombre es el único animal que tropieza dos veces con la misma piedra.
Hay que poner la vacuna al equipo para que no repita. Para que borre el disco duro y empiece de cero o desde el punto que tiene en el casillero. Algo es algo.
Dicen los viejos del lugar que hay que saber la historia para no repetirla, pero en este caso es que cada vez que hablamos del pasado nos aparecen los fantasmas.
Me gusta que Soriano se enfade con la derrota y pruebe el sabor amargo ahora que estamos empezando. Esto le hará más fuerte en su nueva profesión.
Hay que darle tiempo para que ajuste las piezas del equipo. Necesita aprender (como todos) de cada una de las lecciones que te da la vida.
Sin ver el partido creo que perder en Oviedo no es una catástrofe porque el Almería, nuestro Almería, no tiene el oficio de un Mirandés para saber controlar a un rival superior.
Ya les dije que en el primer once de la temporada había muchas caras conocidas. En el segundo más caras nuevas, y de lo que se trata es de hacer mejor al equipo los nuevos y no al contrario.
No quiero ni pensar que aquí el bueno se hace malo y el malo se hace peor.
Como ya pasó con Francisco hay que darle tiempo a Soriano. Sabe lo que tiene. Sabe lo que quiere. Y conoce al presidente como nadie.
Hay que borrar el pasado y no volver a repetir lo de “encajar goles”, “hacer felices a los seguidores rivales” “no dejar la portería a cero” o “repetir viejos errores”.
Hay que vacunar al equipo ya.
Hay que vacunarlos
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