Francisco quiere que la manta le permita taparse atrás / IDEAL
Francisco quiere que la manta le permita taparse atrás y en ataque para sumar un triunfo importante. El conjunto albiazul, como los rojiblancos, también tiene problemas para encontrar el equilibrio y aún no ha logrado ganar como local
JUANJO AGUILERA | IDEAL ALMERÍA
El exentrenador brasileño Elba de Pádua, más conocido como Tim, acuñó una de las frases más brillantes y que describe al fútbol a la perfección. El suramericano decía que «el fútbol es una manta corta: si te tapas los pies te descubres la cabeza, y si te tapas la cabeza te descubres los pies», sobre todo si se habla de equipos modestos como es el caso de la UD Almería. Ante el Atlético, tuvo la cabeza -la defensa- bien cubierta, por lo que no sufrió demasiados sobresaltos.
Alguien dirá, con razón, que los colchoneros hicieron un gol, pero en todo el partido los del 'Cholo' Simeone generaron pocas ocasiones de peligro en jugadas combinadas. Fue el fruto de la buena coordinación defensiva de los rojiblancos. Faltó una manta larga para taparse los pies, porque en ese segundo periodo el Almería se olvidó de atacar.
Ante el Dépor, un equipo con una manta parecida a la que tiene UD Almería -tiene problemas para taparse la cabeza-, los rojiblancos deben aprender a 'acurrucarse' y puede que hasta olvidarse de la manta, a sabiendas que hay que correr riesgos porque, ahora mismo, los puntos señalan a los gallegos como un rival directo en la lucha por la permanencia en la categoría.
La mejora
Francisco dejó claro el viernes aspectos destacables del rival, pero también de la mejora experimentada por los suyos con respecto incluso a lo visto en Anoeta. Está claro que en aquel partido hubo suerte en la primera media hora, pero el fútbol no habla de supuestos. Al final del encuentro, la UD Almería encontró el equilibrio del que precisa esta tarde. El rojiblanco destacó el trabajo en defensa frente al conjunto atlético y, del mismo modo, cosas diferentes. Y tanto.
El equipo no tiene las necesidades que hace solo una semana, antes de viajar a tierras donostiarras, precisamente por aquella 'pesca' en el Cantábrico, pero la proximidad en la clasificación, las prisas que aquejan a quienes, ubicados en estas plazas, actúan como locales son 'motivación' para sus visitantes, por consiguiente, para la UD Almería, que puede dar un buen golpe de cara a la tranquilidad que persiguen los equipos modestos de la Liga.
El rojiblanco anunció que el equipo será más próximo al que mostró las buenas sensaciones en ataque de los primeros tres partidos, con un dibujo muy parecido al de hoy o puede que como el de Anoeta con Ramón Azeez en la posición de Soriano. Lo que pasa es que el maño sabe jugar este tipo de partidos en los que hay mucho en juego. No hay que echar mucho la vista atrás. Una referencia es la de Vallecas del año pasado en el que, aunque no se ganó, la salida del 'corazón' rojiblanco hizo latir al equipo entonces.
Ahora toca también escuchar los latidos otra vez porque la mejora que predicó el técnico se construye más tranquilamente con triunfos que sirvan para ocupar una posición cómoda en la clasificación que permita sufrir menos.
Está claro que la semana que concluye hoy domingo ha servido para poco en lo que se refiere a hacer una lectura extensa sobre el conjunto deportivista porque, entre lunes y miércoles por la noche, solo se pensó en el Atlético de Madrid y, realmente, solo viernes y sábado sirvieron para poner en el punto de mira en los albiazules. De todas formas, el partido sirve casi para que sea el rival el que se preocupe de que la UD Almería no haga su juego.
Un once tipo
Todo apunta a un once más al estilo de la filosofía rojiblanca que a ese que actuó en las dos últimas jornadas, centrado más en impedir que relucieran las virtudes de los dos rivales -Real Sociedad y Atlético- que en darle brillo a las propias.
De este modo, está claro que de medio campo hacia atrás no se producirán modificaciones con el equipo de Anoeta. Es decir, Rubén ocupará su posición bajo palos; con cuatro jugadores por delante que serán Ximo Navarro, Ángel Trujillo, Mauro dos Santos y Sebastián Dubarbier.
La sala de máquinas es la que componen los de siempre, desde que comenzó el campeonato liguero, una dupla formada por Verza y Thomas Partey, que da equilibrio, tal y como significó su gran valedor en la competición española, el técnico del Atlético, Diego Pablo Simeone.
Las dudas se plantean arriba y no por mal rendimiento, sino porque Francisco tiene dónde elegir. Está claro que el hombre en punta es el de Haifa, Hemed, que aunque no haya visto gol aún ejerce un trabajo fundamental que está teniendo consecuencias positivas en la búsqueda de ese equilibrio que busca el técnico.
Jonathan Zongo, Édgar, Wellington Silva e, incluso, Thievy, tienen sus opciones para actuar de inicio, con el burkinés con un mayores posibilidades. Eso en lo que se refiere a las bandas, porque para la posición de enganche siempre suena Fernando Soriano, el jugador clave de esta UD Almería, que precisamente es el que se encarga de 'vigilar' el crecimiento del burkinés para un partido en el que no estarán jugadores que han sido fijos en la convocatoria del técnico almeriense.
Por primera vez, Michel Macedo, que fue titular en la primera cita, y Teerasil Dangda, que era algo así como el 'jugador número 12' y el más utilizado desde el banquillo, se quedan fuera de la lista de convocados para la cita de hoy en Riazor.
Idéntico objetivo
El Deportivo afronta la sexta jornada liguera con el equilibrio como meta. El conjunto de Víctor Fernández, al contrario que la UD Almería, provoca ocasiones con tanta facilidad como se las generan, y sus partidos son tan vistosos para el espectador neutral como sufridos para el aficionado deportivista. Si se compara el ataque, el rojiblanco anota cuatro goles en cinco jornadas, mientras los deportivistas suman siete. La rémora local está en el gol encajado. La UD encajó cinco goles por los 14 que lleva 'recogidos' el conjunto gallego.
Está claro que Francisco y Víctor Fernández parecen beber en las mismas fuentes. El buen juego como camino hacia la victoria es la fórmula, aunque a los albiazules les provoca demasiados problemas, patentes ante Granada o Rayo, por una fragilidad defensiva que permitió que le remontaran ambas citas. Tras la goleada con el Madrid y el infructuoso envite en Balaídos puede haber cambios.
El portugués Cavaleiro y el argentino Fariña han entrado en la convocatoria para el encuentro de hoy, no así el central Pablo Insúa, que aún no tiene el alta médica. Cavaleiro se ha repuesto de una sobrecarga en el muslo y Fariña, arrastra molestias en la rodilla, pero aun así los dos estarán a disposición de Fernández en la sexta jornada del campeonato.
El técnico ya se había mostrado optimista respecto a la posibilidad de contar con los dos, a pesar de los problemas que tuvieron esta semana. De hecho no apuntan para ser titulares en el once de hoy, que presentará cambios con respecto al que jugó en Vigo y 'dejó' escapar el 2-2 por un penalti fallado por Medunjanin. Así, Canella puede entrar como lateral para adelantar a Luisinho por la izquierda.
El once podría ser el formado por Lux -también Fabricio podría ocupar ese puesto señalando a Germán como culpable de los 14 goles encajados-; Laure, Lopo, Sidnei, Canella; Bergantiños; Cuenca, Medunjanin, José Rodríguez, Luisinho, y Postiga. Un once para ver el tamaño de la manta.
El tamaño de la manta

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