domingo, 26 de enero de 2014

El Getafe perdió ante un gran Almería (1-0)


Los andaluces salen de los puestos de descenso gracias al solitario gol de Jonathan Zongo
Javier Estepa 26/01/14 / Marca

Otra jornada más y ya van seis. El Getafe perdió ante un gran Almería y continúa con su caída libre en Liga. Los de Luis García Plaza no ganan un partido desde el 29 de noviembre de 2013 y esta nueva derrota le deja en una situación comprometida. Los andaluces salen de los puestos de descenso gracias al solitario gol de Jonathan Zongo. El árbitro quitó un gol legal a los azulones que pudo marcar el devenir del encuentro.

El partido tuvo dos fases. La primera estuvo marcada por el dominio absoluto del Getafe. En los primeros 45 minutos las ocasiones más claras fueron para los azulones, que vieron cómo el colegiado Prieto Iglesias anulaba un gol legal de Michel y cómo Rafa tocaba madera en el minuto 44 con un gran cabezazo. La suerte no estuvo del lado del equipo de Luis García Plaza. El mejor del Getafe fue Pedro León, que intentó por todos los medios llevar peligro a la portería de un Esteban que detuvo todo lo que se acercó a su portería.

En la segunda mitad la cosa cambió considerablemente y fue el Almería el que se hizo con las riendas de un encuentro que acabaría ganando. Los de Francisco fueron conscientes de la importancia de esos tres puntos y poco a poco se fueron a por ellos. Un gran saque de esquina centrado por Suso lo remató a las mil maravillas un Jonathan Zongo que se estrenaba como goleador en esta Liga BBVA. El estadio estalló de alegría y el equipo, lejos de dar un paso hacia atrás, continuó buscando un gol que le diera tranquilidad.

Fue precisamente Suso el mejor de los andaluces. El joven futbolista da un plus al Almería y en esta jornada lo demostró. Suso puso la cabeza y el último pase y fue sustituido en minuto 77 ovacionado por la grada. Aleix Vidal pudo sentenciar al Getafe en los últimos minutos pero Moyá evitó el 2-0.

Un 2014 inédito
Con este resultado, el Almería deja los puestos de descenso de la clasificación y se queda a tan sólo dos puntos del Getafe. Por su parte, los azulones se meten en un buen lío porque comienzan a ver demasiado cerca las plazas peligrosas de la Primera división. Los de Luis García Plaza aún no saben lo que es ganar en 2014.
En caída libre - MARCA.com

UD ALMERÍA - GETAFE · LA CRÓNICA
Del caos a la euforia (1-0)
El Almería reacciona en la segunda mitad con un gol de cabeza de Jonathan tras recibir un baño del Getafe en la primera parte
P. GREGORIO | DIARIO DE ALMERÍA

En diez veces que se repitiera el duelo Almería-Getafe, los locales solo lo ganarían ayer, cuando tuvieron de su parte a la Virgen del Mar, a un inspirado Esteban bajo palos y a un árbitro que le anuló un gol legal a los visitantes.

Pero fútbol es fútbol como solía decir Boskov y la balanza se decantó de lado rojiblanco pese a recibir uno de los mayores baños de juego de la temporada durante una primera mitad que fue un canto a la zozobra y la anarquía táctica.

Salvando los diez primeros minutos de tanteo, en los que incluso pudo adelantarse el Getafe por medio de Sarabia en una comprometida cesión de Tébar a Esteban que abortó el meta asturiano achicando portería, el Almería deambuló perdido por el terreno de juego.

El centro del campo unionista fue una caricatura, un continuo perseguir sombras ante las buenas triangulaciones entre Míchel, Mosquera, Sarabia, Diego Castro y Pedro León. Impotente para sacar el balón jugado ante la forzosa ausencia de Verza, el Almería abusó del pelotazo en largo de sus defensores y de los cambios de orientación sin ningún sentido.

El caos era tal que en más de una ocasión los encargados de intentar sacar el balón jugado fueron los centrales, ora Trujillo, ora Torsiglieri, al no haber nadie que bajara a recibir y prestara sus servicios para llevar el esférico hasta el área contraria con un mínimo de cordura.

No es exagerado asegurar que 40 de los 45 primeros minutos se jugaron en los 50 metros de campo unionista, y las pocas veces que llegaba a la zona de finalización se encontraba con apenas cuatro atacantes contra ocho zagueros azulones, lo que da una buena muestra del gran trabajo sin balón del equipo de Luis García.

A esas alturas de partido el técnico del conjunto madrileño se desgañitaba porque pese al dominio abrumador, su equipo no encontraba el camino del gol. Lo hizo Míchel a los 20 minutos, batiendo a Esteban por debajo de las piernas, pero Prieto Iglesias anulaba la acción al señalar un fuera de juego inexistente.

Luego sería Diego Castro quien, con todo a su favor dentro del área, disparaba manso para facilitar la estirada de Esteban. Y a cinco minutos para el final del primer tiempo el central Rafa se topaba con el larguero con un cabezazo tras un saque de esquina.

La llegada del descanso fue lo mejor que pudo pasarle a un Almería más perdido que el Soldado Ryan, donde se echó en falta que Francisco leyera mejor el partido moviendo el banquillo si quiera para espabilar a los que había dentro o para dar entrada a Corona y garantizarse, cuando menos, mayor posesión del esférico.

Ni una ni otra cosa hizo el técnico local, que acabaría ganando el encuentro desde el inmovilismo, gracias a una acción a balón parado. Fue al poco de regresar de vestuarios en un saque de esquina sacado con buena rosca por parte de Suso al que Jonathan atacó con fe superando a su marcador y cabeceando casi de espaldas para batir a Moyá después de tocar en el larguero.

Del caos se pasó a la euforia y el Almería tuvo unos minutos contra las cuerdas al Getafe en acciones de contragolpe al aprovechar que los azulones descompusieron sus líneas de forma momentáena, pero al poco supieron recomponerse para buscar la igualada, aunque ya sin la misma convicción, confiándolo todo a la pericia de Pedro León a balón parado.

En la recta final el marcador pudo incluso ampliarse, pero Aleix no estuvo inspirado en la definición, primero en una contra conducida por Soriano en la que optó por asistir en lugar de rematar y en el descuento al disparar al muñeco con la portería vacía. Con todo, tres puntos a la buchaca y fuera del descenso.
Del caos a la euforia

No hay comentarios:

Publicar un comentario