Al minuto de juego todo se va al garete

Joaquín regala el 1-0 y el filial domina, pero sigue sin gol 
El arranque de la segunda parte, igual de malo
JESÚS JAQUES CÁDIZ |  DIARIO DE ALMERÍA

Adri conduce el balón en una jugada en el centro del campo rojiblanco

El arranque del partido no podía ser más placentero para los locales, que se adelantaban a los 25 segundos gracias a un regalo de la zaga almeriense. Joaquín no acertaba en el despeje en un error clamoroso y Kike López marcaba a placer a puerta vacía tras superar por velocidad al cancerbero Víctor. Los amarillos se encontraban con un gol inesperado casi sin salir del vestuario a modo de alfombra roja.

Lejos de manejar el encuentro a su antojo, los amarillos perdían gas con el paso de los minutos, se acomodaban en su terreno y daban un paso atrás para ceder la iniciativa a los canteranos rojiblancos ante el enfado de una afición cadista que exigía, con pitos, mayores prestaciones a los suyos.

El comienzo del segundo tiempo era un calco del primero. El Cádiz volvía a marcar en el minuto inicial, esta vez por mediación de Juan Villar. El onubense recibía un pase en profundidad, superaba a Marín por veclocidad y picaba el esférico por encima de Víctor.

Sin hacer nada del otro mundo, los gaditanos se veían con una cómoda diferencia en el marcador frente a un conjunto que no se rendía pese a su candidez tanto en defensa como en ataque. Porque el Almería B llegaba al área local pero sin mordiente. La reacción del Almería resultaba tan tímida que el partido entraba en una fase de letargo del que el Cádiz intentaba despertar a la contra. Los espacios que el Almería B dejaba atrás, obligado por las circunstancias, eran una bendición para los amarillos. En un contragolpe de manual (minuto 66), el portero visitante evitaba el tercer gol del Cádiz con una doble intervención a dos disparos a bocajarro de Juan Villar. Perico puso con un golazo la sentencia para el filial.
Al minuto de juego todo se va al garete