Marcos Tébar reconoce que en el vestuario rojiblanco existen una «ganas enormes» para que llegue el 19 de agosto y se midan al Villarreal en Almería
J. F. | IDEAL ALMERÍA
En un estilo futbolístico tan ofensivo como el que plantea, de inicio, Francisco, hay jugadores que deben aportar el equilibrio. Para que haya una buena mezcla entre el ataque y la defensa. La temporada pasada fueron Verza y Corona los que conformaban el doble pivote. Para esta campaña ha llegado un Marcos Tébar llamado para ser el que ejerza de 'coche escoba' y tape los huecos dejados por sus compañeros cuando suben en busca de la portería contraria. Lo ha hecho en esta pretemporada. Aunque lo que espera es hacerlo, ya, en la Liga BBVA. Reconoció el mediocentro madrileño, en zona mixta, que ya es «ansiedad» lo que hay en el vestuario. De que sean las 22.00 horas del 19 de agosto y que el Estadio de los Juegos Mediterráneos se vea el inicio del nuevo ejercicio de manera oficial para la UDA. Ayer, en la previa del último choque amistoso, casi ni se habló de lo que sucederá esta noche en Córdoba y sí de lo que está siendo y puede ser el año para el conjunto rojiblanco.
De menos a más
Pocas horas antes de acabar los partidos de preparación, Marcos Tébar estaba satisfecho por el desarrollo de la corta pretemporada. Apuntó el madrileño que las cosas «han ido bien. Creo que el equipo ha ido de menos a más. Ha ido asimilando los conceptos que quiere el míster. Poco a poco se ha visto lo que quería transmitir y lo que quiere ver en el campo».
Recordando lo vivido el martes por la noche en el Estadio de los Juegos Mediterráneos, en la presentación del plantel almeriense ante su público frente al Granada de Lucas Alcaraz, Marcos Tébar salió con la misma sensación que el resto del vestuario. «Estuvo bien. Fue un partido en el que nos salieron las cosas. Tuvimos la posesión de balón. Creamos bastantes ocasiones de gol. El equipo estuvo bastante acertado».
Fue una continuación de lo vivido en los cinco choques anteriores. Ni quería lanzar las campanas al vuelo por la imagen dada ni quería dar una sensación de pesimismo. Más bien, pies en el suelo ante lo que se avecina. «Han habido buenas sensaciones. Es cierto que son partidos de pretemporada. Partidos de preparación en los que las piernas no dan para lo que la cabeza quiere. Poco a poco, son partidos para coger la forma y llegar de la mejor manera posible al partido que es el importante ante el Villarreal», demostrando que lo que importa es dejar buena imagen y quedarse con los tres puntos ante el equipo entrenado por Marcelino García Toral.
El ex Girona se está sintiendo cómodo en lo que pide Francisco a sus jugadores sobre el terreno de juego. Un estilo atrevido y que puede suponer muchos riesgos para un equipo joven y sin excesiva experiencia en la categoría. No le tiene miedo a nada. Más bien, todo lo contrario. «Es lo que pide el míster y, además, es un sistema que a los jugadores nos gusta. Tenemos el balón, lo sacamos desde atrás. Hay que tener mucha movilidad arriba. Creo que es un sistema que nos viene bien por las condiciones que hay entre los jugadores de la plantilla», manifestó Marcos Tébar a los medios de comunicación.
En lo que no quiere ni pararse a pensar ni a lamentar es sobre los horarios de las dos primeras jornadas. Se lo toma con resignación que haya cuatro días de distancia entre recibir al Villarreal y desplazarse a Getafe para jugar en el sur de Madrid. Confía en que lo mismo que le ha pasado a la UDA en este inicio de competición le ocurra a otros conforme pasen las jornadas ligueras. «Ha tocado esos dos primeros horarios. Habrá que acomodarnos al calendario y, supongo, en otras ocasiones tendremos más tiempo para preparar los partidos», señaló queriendo pasar página y centrarse en lo importante.
Que no es otra cosa que el debut ante el Villarreal en el Estadio de los Juegos Mediterráneos. Marcos Tébar, al igual que sucedió a la plantilla de la UDA que repitió de la temporada pasada, ha vivido unas vacaciones cortas. Las más cortas de todo el fútbol profesional. Pero si cuando llegó dijo que no le importaba, ahora mucho menos. Se reafirma en que casi está como un niño con zapatos nuevos. Mira una y otra vez el reloj para ver que cada vez queda menos tiempo para ese debut en la Liga BBVA con un equipo con ficha del primer plantel. Quedan nueve días para que el particular pistoletazo de salida se produzca. «Desde que empezó la pretemporada estábamos deseando que llegase el primer partido y que nos metamos ya en competición, que es lo que realmente queremos y es lo bonito». Preguntado si lo que tiene él y el vestuario son nervios, Marcos Tébar cambia la palabra por «ansiedad». «No son nervios. Sí que es ansiedad de que empiece el primer partido y tomar forma para la competición. Empezar esta Liga que es tan ilusionante para todos». Palabra de un 'equilibrista'.
«Tenemos ya ansiedad de que comience la competición liguera»
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