El gafe apaga la reacción

El gafe apaga la reacción UD ALMERÍA 3 – REAL MURCIA 2

Dolorosa derrota del conjunto grana por la forma en la que se dio, con cinco lesionados y jugando la recta final con un futbolista menos al tener todos los cambios realizados.

La mala suerte, el gafe, lo que quieran, se cebó con el Real Murcia en el duelo de los Juegos del Mediterráneo, en el que cosechamos una derrota ante un rival directo por los puestos de ascenso a Primera División. Caer en esta campo entra dentro de la lógica, pero no hacerlo con las desgracias que hubo en tierras andaluzas: cinco jugadores lesionados, lo que le obligó a jugar el desenlace del choque con un futbolista menos. El dolor es mayor si tenemos en cuenta la proximidad del próximo compromiso, ante el Real Madrid Castilla el viernes.

Pero también hay que dar gran parte de culpa de la derrota a la primera media hora, tanto nuestra como del oponente. En el primer minuto la UD Almería había puesto tierra de por medio con el primer gol de la tarde de Soriano, que finalizó una jugada por banda diestra de Vidal. Ambos serían los protagonistas del primer periodo, pues ellos fueron los que también fabricaron el segundo. Fue una copia del tanto inaugural a la media hora.

Sin mucho más, con dos acciones, los rojiblancos tenían la victoria en el bolsillo ante un Real Murcia que manejaba el balón pero que sufría en los contragolpes, sobre todo con la velocidad de Vidal.

Tras no poder alinear a Emilio Sánchez, lesionado en el calentamiento, en el descanso se quedó en vestuarios Mauro, sustituido por Jorge García. Pero tanto infortunio parecía romperse con el 2-1, de Saúl Berjón. Gran jugada colectiva del equipo que finalizó el asturiano, poniendo mucha emoción para el resto del encuentro.

Se estaba viendo la mejor versión de los pupilos de Siviero, que encerraban a los de Gracia en su propio campo. Aunque de nuevo más contratiempos, como la lesión de Sutil y el tercer tanto de la UD Almería, que llegó en un contragolpe en el que hubo una clara falta sobre Jonatan en el inicio de la jugada. El autor, Casquero.

Pero este Real Murcia tiene mucha fe, creen sí y nunca baja los brazos. A falta de veinte minutos Molinero, con calidad, puso el 3-2 y volvió a meternos de lleno en la pelea por los puntos. El campo parecía inclinado a la meta de Esteban, el empate no era nada descabellado. Y eso que el varapalo más duro hizo acto de presencia: Catalá también KO y sin posibilidad de reemplazarlo.

Con uno menos fue un ida y vuelta. Balón nuestro, con presencia en ataque, pero salidas muy peligrosas de la UD Almería. Mientras que Jonatan pudo tener la igualada en sus votas si no llega a errar en el control, Javi Jiménez evitó que la renta aumentase con grandes intervenciones ante Ulloa y Jonathan.
El gafe apaga la reacción