PACO GREGORIO / DIARIO DE ALMERÍA
Alfonso García come pipas en el 'stage' de La Manga el verano pasado.La cuenta atrás para el inicio de la pretemporada sigue activada y a dos semanas vista del arranque de la misma la impaciencia cunde entre la afición rojiblanca por la falta de movimientos, pero no así en los despachos del club, al considerar que se cuenta con un bloque considerable de 18 jugadores en nómina para efectuar las altas y bajas correspondientes en el momento oportuno.
Alfonso García ha repetido por activa y por pasiva que confía en la base que ha quedado tras la venta de Alves al Valencia, y las marchas de M'bami y Juanito al cumplir contrato, así como de Luna y Feghouli al agotar la cesión desde sus respectivos equipos. Con esos movimientos, a 23 de junio el Almería cuenta con 18 jugadores en nómina. En la portería se ha renovado por dos campañas al veterano Esteban, sobre el que recae la responsabilidad de la titularidad, y se sube desde el filial a Diego García.
En defensa el número de efectivos se eleva a media docena, contando a los laterales Michel y Jakobsen así como a los cuatro centrales, Carlos García, Marcelo Silva, Hernán Pellerano y Santiago Acasiete, si bien más de uno ha mostrado su intención de abandonar la disciplina unionista.
Otra media docena de futbolistas hay para la media, con Juanma Ortiz, Ortiz Bernal, Corona, Vargas, Bernardello y Albert Crusat. La intención manifiesta de Alberto Benito es buscar algo de lo que el equipo ha adolecido este curso: un organizador. En la parcela ofensiva, a la espera de lo que ocurra con Piatti (a este paso repite lo de Kalu Uche y el cuento del lobo), se cuenta con Goitom, Ulloa y el propio jugador nigeriano, que bebe los vientos por irse pero no trae una oferta interesante. Y todos ellos a la espera de conocer quién los dirigirá. Como la afición rojiblanca, que ya desespera.
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