PABLO LAYNEZ | ACTUALIZADO 20.09.2015

Lolo Reyes volverá a ser titular en el centro del campo tras la lesión de Fatau.
No está siguiendo precisamente el Almería la conocida como media inglesa (victoria en casa y puntuar fuera) en este comienzo de casa. Lejos del Mediterráneo, pleno de derrotas, situación que mantiene al bloque en tensión y que no permite tomarse los partidos con cierta calma, con la tranquilidad necesaria para que las cosas vayan rodadas. Si bien hasta Lugo el equipo de Sergi se había mostrado muy efectivo en ataque y dubitativo en defensa, en el Anxo Carro los problemas atrás siguieron y se unió a éstos la falta de fútbol creativo.
Cada partido en casa se convierte en un borrón y cuenta nueva. De un fin de semana a otro hay que pasar página, puesto que de tierras mañas y gallegas el Almería se vino con el rabo entre las piernas. Esa falta de regularidad ni transmite seguridad al equipo ni calma las peticiones de una afición, que esperaba un arranque bastante más positivo. Pero Sergi y su plantilla están insistiendo en que el grupo es nuevo y lleva tiempo asimilar el nuevo estilo que quiere el míster.
Después de la mala imagen dada en Lugo y de un nuevo gol encajado a balón parado, a los rojiblancos les toca ahora cambiar las críticas por alegrías en el Mediterráneo. De momento en casa van seis de seis y aunque tampoco se está dando la imagen de conjunto sólido y aspirante, por lo menos se están sacando los partidos y demostrando que cuando sube la intensidad, este equipo es temible. El problema llega en los minutos en los que desconecta o se pierde en un juego espeso y demasiado lento en el centro del campo, algo que tratará de propiciar esta tarde el Alavés, un conjunto similar al Osasuna.
Con Bordalás a la cabeza, un técnico que no esconde su filosofía defensiva, el equipo vitoriano presiona mucho en el centro del campo y busca contragolpes gracias a la velocidad que tiene arriba. Otra dura vara con la que medir la claridad de ideas de los rojiblancos. Será un partido para mover rápido el balón, para que aparezcan hombres entre líneas y sobre todo para que los repliegues sean mejores que hasta el momento cuando se pierda el balón. Osasuna supo aprovechar la lentitud almeriense a la hora de correr hacia su propia portería.
En el aspecto deportivo, Sergi introducirá varios cambios en el once. Las dos malas noticias de la semana han sido las molestias de Fatau en las rodillas que le han dejado fuera y la lesión en la propia mañana de ayer sábado del canterano Adri Castellano, que volverá a dejar el lateral izquierdo libre para un Dubarbier que habrá que ver cómo reacciona tras el tirón de orejas del último partido. El puesto del jugador africano será para Lolo Reyes, cuyo rol en la recuperación debe ser cada vez más importante y que tendrá hoy una prueba de fuego.
Por el contrario, Cuéllar se ha recuperado de las molestias que acusó en el Anxo Carro y Chuli ya ha superado la fuerte contusión que sufrió frente a Osasuna. Precisamente su movilidad y desgaste serán fundamentales para abrir la muralla vitoriana, algo que también se demandará a futbolistas técnicos como Iván Sánchez o Pozo si cuentan con minutos a lo largo de la tarde. Compromisos como éste, en los que el Almería tiene que dar la cara, son los que sirven para coger confianza.
Una gran vara de medir
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