sábado, 25 de octubre de 2014

Dos animales hambrientos


Necesidades rojiblancas en el Mediterráneo: los almerienses necesitan ganar de una vez ante su afición y los bilbaínos mostrar su verdadera cara 
El peor visitante ante un local mediocre
PABLO LAYNEZ | DIARIO DE ALMERÍA

Pocas cosas hay más peligrosas que un animal hambriento y acorralado. Cuando las tripas suenan, las presas ya pueden echarse a temblar porque antes o después, terminarán siendo papilla en sus mandíbulas. Por muchos escondites o carreras que haya entre el depredador y el depredado, la naturaleza es implacable y las virtudes del más fuerte terminan por relucir. Es la ley de la selva y en ella no hay concesiones.

El Almería debe de entrar en la teoría de la evolución y adaptarse a ganar en casa porque su supervivencia en la máxima categoría depende de que comience a devorar puntos en el Mediterráneo. Los de Francisco tienen los colmillos afilados desde la primera jornada, pero todavía no han conseguido hincárselo a Espanyol, Córdoba, Atlético de Madrid ni Elche.

Lo malo es que esta tarde viene un rival que también lleva sin probar bocado mucho tiempo y necesita la victoria como el comer. A años luz está el actual Athletic del que vino hace tan sólo unos meses cuando el Almería consiguió la salvación. Como a tantos otros, la Champions League le está afectando demasiado deportivamente y eso ha provocado que esté al borde del descenso, con cuatro puntos menos que los almerienses. Por eso, por dejar más herido todavía a un león que llega cojo, los de Francisco quieren conseguir su primera victoria en casa de la temporada. La sangre la huelen los dos carnívoros y el que dé la primera dentellada tendrá mucho ganado en el combate por la supervivencia.

A lo largo de la semana, Francisco ha insistido en mucho vídeo y mucho trabajo táctico para tratar de controlar un partido en el que el técnico almeriense recupera a los tocados, ya que el defensa brasileño Michel Macedo, que desde el miércoles estaba renqueante por un golpe en el cuádriceps, está en perfecto estado. De todas formas, el once parece que no variará mucho del habitual en casa, incluso con la presencia de Soriano en la posición de enganche. La única duda está en las bandas, sobre todo en la derecha, por donde la calidad de Wellington Silva puede imponerse al trabajo de Jonathan Zongo, que no estuvo convocado para Villarreal, como tampoco estuvo Thievy, que también vuelve.

La otra opción que maneja Francisco, y que sólo ha utilizado esta temporada en casa frente al Atlético de Madrid, es utilizar el trivote. El entrenador lo está usando lejos del Mediterráneo y ante rivales de entidad, como la que tiene el Athletic aunque los resultados digan lo contrario. Al Almería le está saliendo rentable jugar con Thomas, Verza y Azeez, aunque ello implica no practicar el juego abierto y de ataque que caracterizan a la filosofía francisquista. Hoy puede ser un día idóneo para ver si con seriedad y orden sobre el césped, los rojiblancos logran su primera victoria como caseros y le dan una merecida alegría a su afición.

Por su parte, el Athletic voló ayer en su avión privado sin Carlos Gurpegi, que es baja debido a una gonalgia en su rodilla derecha. Aurtenetxe, que se sentó en el banquillo de Oporto, también se quedó fuera junto a Unai López, Toquero, Sola, Morán y el lesionado Aketxe, en la última fase de recuperación de una fractura en un dedo del pie derecho.
Dos animales hambrientos

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